Dotado de un afinado sentido de la supervivencia, Abdelaziz Rantisi (Yibna, ahora Yavné para el Estado israelí, 23-10-1947) sólo resultó herido tras un masivo ataque con misiles. Personaje culto, pediatra formado en Alejandría y Gaza, padre de seis hijos y abuelo de 10 nietos y nietas, mantiene una conversación afable y por regla general es el encargado de recibir a los periodistas y a los políticos que se interesan por la organización Hamas, importante grupo islámico que ha matado a cientos de israelís con ataques suicidas.

Cuarto de 12 hermanos, tenía seis meses cuando sus padres le trasladaron con ellos al campo de refugiados de Jan Yunis, en la franja de Gaza, que entonces era egipcia, porque acababa de fundarse el Estado de Israel. Creció en medio de un intenso integrismo islámico y en un periodo de cárcel conoció al jeque Ahmed Yassin, líder espiritual con el que, junto a otros cuatro, fundó Hamas en 1987.

En relación con la guerra de Irak, Rantisi incitó a sus miles de seguidores a "quemar la tierra bajo los pies de los invasores norteamericanos, sobre todo en Arabia Saudí". Aunque usa del diálogo no acepta acuerdos que no recojan íntegramente sus tesis y el ataque del que se ha salvado radicalizará aún más a los integrantes de Hamas. Así, la propuesta Hoja de ruta no conduce a nada y la sangre lo mancha todo.