Escritor

Escribí un día que la despedida de Felipe con la Sannun debió ser un papelón, que lo tuvo veinticuatro horas como distraído. Su madre no hacía otra cosa que decirle:

--¿Te pasa algo, Felipe?

--¿Y qué le digo, mamá, si es mi amor...?

¿Cómo le decía que no le había gustado a Luis María Anson, que es el probador del reino? Lo ibas a mandar a la m... con toda la razón del mundo. Porque después está Ana Rosa Quintana, que la pobre se tuvo que casar o envolver con Volver a empezar , o sea con Garci, que tampoco era para tirar cohetes. Y el encuentro fue muy duro:

--Eres un calzonazo... Vámonos adonde sea...

--¿Y cómo dejo a Euscadi sola...? ¿Y Extremadura con lo que me quiere?

--Pero, de qué me hablas...

--Y después, porqué hiciste el pase de bragas...

--Bueno, adiós...

En esa época Alonso Guerrero no dormía bien por las noches y Letizia le pasaba la factura:

--¿Ves? Te tengo dicho que los callos con garbanzos son para el almuerzo...

--Qué sabes tú... Un escritor sólo tiene heces: si una esposa no entiende que tiene que limpiarlas, es mejor divorciarse de ella...

--¿Qué estás esperando para largarte, machista?

Letizia estaba harta de verlo pasear por la habitación:

--Esa novela te va a matar...

--Qué sabes tú...

Aquello era un infierno. Letizia quería volar y voló. El PP se dio cuenta y la puso junto a Urdaci, que lo transforma todo en aplausos...

Ahora, después de todo aquello, Anson ha vuelto a salir a la palestra para decir lo obvio: que Letizia es una mujer que se lo ha hecho todo a pulso. No nos ha contado su relación con Alonso Guerrero, pero éste tiene una novela que no se la salta un galgo.

Felipe, por fin, ha encontrado a una mujer. Es de esperar que no sea insomne, porque se la arma.