Alberto Contador dio ayer una alegría a la afición atacando en una etapa de la que, en principio, se esperaba poco y cuya dificultad más importante era el Col de Manse, de segunda categoría. Pues bien, de sus rampas y de la posterior bajada, Contador logró descontar 18 segundos a Frank Schleck y al líder Voeckler y más de un minuto a Andy Schleck. Los Alpes prometen.