THta pasado ya un año desde que Zapatero ganó las elecciones y cualquier reflexión crítica deberá tener en cuenta el punto de partida: una sociedad conmocionada, un estilo de gobernar sin capacidad de diálogo y gravísimos problemas sociales (vivienda, precariedad laboral, violencia contra las mujeres, etcétera) que hasta entonces ni se habían abordado de forma seria ni provocaban incomodidades políticas al señor Aznar .

Un año después hemos mejorado en talante, diálogo y formas democráticas, hasta el punto de poder discrepar del Gobierno sin ser tildado de filoterrorista o traidor a la patria: es un gran avance. Algunos de los retos no son sencillos y necesitarán algo más de tiempo hasta ver frutos. Cuando lleguemos al ecuador de la legislatura habrá que tener algo más que proyectos y medidas: tendremos que analizar resultados y ver si los precios de los pisos se han moderado, si se ha reactivado la construcción de viviendas de protección oficial, si se ha reducido el número de contratos precarios y aumentado el de indefinidos, si la investigación, la educación y el bienestar social se convierten en el eje central de una nueva forma de gobernar. Esperamos.

*Profesor y activistade los Derechos Humanos