Dentro de pocos días, celebraremos de nuevo la festividad de Nuestra Señora de Guadalupe, patrona de la Hispanidad y patrona de Extremadura y, de nuevo una vez más los actos religiosos de esta festividad, se celebrarán en una diócesis ajena a Extremadura, como es la Diócesis toledana, y, presididos por el arzobispo de Toledo y, de nuevo, los extremeños nos preguntamos, ¿hasta cuándo?
¿Cuánto tiempo más hemos de esperar para que nuestras autoridades políticas y religiosas reclamen para Extremadura la devolución de Guadalupe y la comarca que rodea a la Puebla sigan perteneciendo a la diócesis toledana?
¿Para cuándo el Real Monasterio de Guadalupe pasará a dominio religioso de Extremadura y regido por una diócesis extremeña?
Creo que va siendo hora que los extremeños reclamemos este derecho desde dentro de Extremadura, pues me consta que hay muchos extremeños que viven fuera de nuestra tierra que llevan años reclamándolo, entre ellos el grupo Alconetar en Madrid.
Yo pediría a todos los extremeños que este año se desplacen a festejar a nuestra patrona a Guadalupe, lo hicieran con algún símbolo reivindicativo, como pudieran ser, pancartas, pegatinas, etcétera, para recibir pacíficamente, pero con firme decisión al arzobispo de Toledo, despidiéndole para siempre de nuestra demarcación religiosa, que pasaría íntegramente a ser extremeña por derecho natural.
Eusebio Rodríguez Rodríguez **
Cáceres
