WLwa futura A-43, la autovía que unirá Extremadura con el Levante, se encuentra de nuevo en un mar de dudas que tiene en zozobra a dos comarcas extremeñas: La Siberia y La Serena. Cuando ya la ministra de Fomento, Magdalena Alvarez , el pasado 15 de marzo y con ocasión de la inauguración del tramo entre el pantano de García de Sola y el Puerto de los Carneros de la CN-430, parecía haber despejado definitivamente la incógnita de por dónde transcurriría esta carretera al manifestar que lo haría por La Siberia, tal como, por otra parte, está reflejado en el PEIT, la representante en Extremadura del Gobierno central, Carmen Pereira ha matizado ahora a la ministra al señalar que el trazado final aún está en estudio.
Bien está que se tomen todas las precauciones necesarias y que se hagan todos los análisis pertinentes antes de decidir por dónde va a transcurrir una autovía, pero lo que está haciendo el Gobierno en este caso se parece mucho a marear la perdiz apuntando primero a un trazado y después a otro, sometiendo a las comarcas afectadas, sin ninguna necesidad, a una especie de ducha de contrastes que no habla muy positivamente del rigor de Fomento en un asunto tan importante como éste.
