WEw l dato del tercer trimestre es una buena noticia, ya que el paro cayó en 14.100 personas en España y nada menos que en 5.100 en Extremadura. Es el primer descenso en la Encuesta de Población Activa (EPA) en dos años y un gran respiro psicológico, ya que el paro creció en 802.000 y 126.700 personas en el país en los dos trimestres anteriores. Así, la caída libre del paro ha finalizado. Como otros indicadores, el dato apunta a que la crisis toca fondo. Pero ello no implica que la tendencia se haya invertido, ya que el paro volverá a crecer en el último trimestre del año y en el primero del 2010. Con todo, la bondad del dato no debe minusvalorarse. Es cierto que el tercer trimestre acostumbra a ser favorable gracias a los empleos estacionales del verano, pero el año pasado el paro no solo no disminuyó, sino que aumentó en nada menos que 217.000 personas. La mejora es, pues, innegable y el paro no solo ha descendido en los servicios, sino también en la construcción y la industria. Puede deberse en parte a las obras del Plan E, lo que indicaría que las medidas del Gobierno para suavizar la crisis tienen un cierto efecto. Pero también sería un error creer que estamos ya en el cambio de tendencia. Desde el verano del 2007, inicio de la crisis internacional, el paro en España ha pasado de 1,8 a 4,1 millones de personas y la tasa de paro ha subido 10 puntos. Un fenómeno de esta magnitud ha causado una gran retracción del consumo (que realimenta la crisis), que no va a cambiar en dos días.

Además, el paro baja, en gran parte, porque desciende la población que quiere trabajar, en especial la inmigrante. Pero la destrucción de empleo se reduce poco respecto al mismo trimestre del 2008.