XExl PP está en plena ebullición interna: Congreso Nacional con éxito de Mariano Rajoy. Tras él todos los populares estamos involucrados.

Convocatorias de congresos regionales, entre ellos el de Extremadura, donde por el momento hay dos candidaturas.

Algunos, sospecho, pensarán en aquello del quítate tú para ponerme yo y en los intereses personales, sin duda legítimos. Otros en que estamos ante una confrontación de ideas, lo cual no es así, porque ambos candidatos están en sintonía ideológica.

Se me ha ocurrido emplear el vocablo versus, a sabiendas del mal uso que a veces hacemos de él (se emplea como contra , frenta a ), para relatar el juego político, que se desarrolla diariamente como la Liga y se culmina cada cuatro años con un campeonato europeo.

El deporte siempre lleva el lema de juega limpio , aunque luego se cometan faltas, que son sancionadas por el árbitro. En el seno del PP extremeño ocurre algo similar: hay reglamentos, se establecen normas de juego, pero no se cumple el juego limpio.

En este caso el candidato B juega en campo contrario y además no cuenta con los mismos medios que el candidato F.

Así en un primer tiempo se deciden el número de compromisarios, ubicación de sedes electorales según conveniencia, la lista de afiliados no está a disposición de los posibles candidatos, que se buscan la vida como pueden. Sólo están a disposición del segundo, que con su equipo técnico intenta conseguir el mayor número de compromisarios. Este primer tiempo es del aparato del partido.

Si el votante critica las listas cerradas, no hay que extrañarse de que los afiliados critiquen el mismo sistema dentro del propio partido, lo que viene a ratificar nuestro sistema de partitocracia de siempre sin democracia interna, de la que tanto presumimos.

En el desarrollo del encuentro se incumplen las reglas de nuevo: no vale quién empezó primero con insultos, sectarismo y chantaje, antes de montarse la correspondiente tangana, que acaba con el candidato B fuera de la selección del consejo asesor de la TV autonómica, ¡por falta de lealtad! ¡O juegas conmigo o te amulo! A todo esto, alguien identificado coon la directiva azuza el fuego en lugar de apagarlo e invita a dar más leña al mono y a la confrontación, ya que el candidato F es canterano de toda la vida . El otro debe ser de Pernambuco.

Por lo bajini se entona lo fácil, ¡Cáceres! ¡Cáceres!... En lugar de entonar todos a una ¡Extremadura! Estamos en el intermedio del partido.

El candidato F estimula a los suyos: vamos a ganar. Seguiréis todos en el equipo y yo podré dirigiros .

Un díscolo, que siempre hay en el vestuario, le insinúa: podemos cambiar la táctica, integrar a más gente que siempre dejamos en el banquillo, dirigir el equipo desde casa como prometiste . ¡Bueno, lo intentaré! Pero necesito otra oportunidad .El díscolo piensa para sus adentros No es malo el sastre que reconoce el paño, ¡para qué cambiar ! El candidato B estimula a los suyos invitándoles a trabajar. Nada puede ofrecer porque nada tiene, pero desea hacer un buen partido, ganar al final del segundo tiempo y convertirse en el nuevo entrenador. Para ello, los compromisarios tienen la oportunidad de cambiar de entrenador, si previo al desenlace final no se ha pactado un equipo conjunto. Entrenador que tiene tres años, contando con los que están y los que se incorporen, para dar una dura y diaria batalla al único adversario político, el PSOE, que en este encuentro es mero espectador.

*Médico. Miembro del Comité

Provincial del PP de Cáceres