Se dice que es preferible ser cabeza de ratón que cola de león. La explicación es obvia y no viene al caso. Eso mismo pensarán los habitantes de Portezuelo y Pescueza que, con sus alcaldes a la cabeza, son capaces de poner su pueblo patas arriba durante unos días y armar la marimorena con el único fin de crear ilusión y demostrar al mundo que el medio rural existe, que sus gentes piensan, sienten, y movilizan a miles de personas y a la prensa, radio y televisión. Y sus nombres suenan y los visitan gentes diversas. Es el tercer año del Festivalino de Pescueza, el festival más pequeño del mundo. Con artistas de postín como los cantantes Manu Carrasco, María Villalón y Zentric que actuaron como padrinos ante unas 15.000 personas en un pueblo de 180 habitantes. Es el más solidario y ecológico y el más grande, por lo pequeño y por el entusiasmo de sus habitantes. No deja de ser chocante que, cuando unos devastan grandes zonas terrestres, avasallan el paisaje que afecta al cambio climático, los pescozanos intentan restaurar parte de los árboles que nuestra Extremadura perdió.

El nombre de Pescueza se reflejó en los principales diarios regionales y se escuchó en los 40 Principales. El pueblo ha ganado un gran alcalde, y la Iglesia ha perdido un buen pastor que intenta por todos los medios promocionar el medio rural.

Son muchos los pueblos que se inventan y reinventan su futuro a base de ingenio y creatividad como es el caso de Portezuelo, otra localidad extremeña con apenas 280 habitantes que ofrece el Festival Medieval con un presupuesto exiguo en lo económico pero cuantioso porque cuenta con el entusiasmo de sus gentes y la participación generosa y desinteresada de todo el pueblo, que confeccionan trajes de época, no sólo para ellos sino para ofrecérselos a cualquier visitante que se los quiera poner; mediante talleres de dulces típicos, embutidos, pasacalles, muestras de cetrería, organizan todo lo necesario para que su pueblo brille en primavera. La Junta, la diputación provincial y Adesval reconocen estos esfuerzos y los apoyan. Como debe ser.