Los tristes hechos ocurridos en Navalmoral de la Mata, con la muerte de tres niños ahogados en una charca han puesto de manifiesto la laguna legal existente a la hora de regular este tipo de espacios. No hay una norma que obligue a acotar estos abrevaderos tan habituales en las explotaciones ganaderas extremeñas, que se cuentan por cientos. Pero el suceso del Campo Arañuelo seguramente hará necesario actuar a las autoridades locales para evitar estos episodios que han teñido de luto a toda una población en este triste final de la Semana Santa.

Pero el periodo vacacional ha traído también buenas noticias. Sobre todo para el número de visitantes en Extremadura, que se ha convertido en la cuarta comunidad autónoma en el ránking nacional del turismo rural. Sólo en Cáceres, el número de foráneos se ha incrementado en más del 30%, según los datos oficiales, lo que supone que 30.000 turistas hayan pasado por la ciudad en este periodo. Por otro lado, en Trujillo, uno de los grandes destinos turísticos de la comunidad, ha acogido a más de 15.000 visitantes durante la Semana Santa. Algo parecido ha pasado en comarcas como La Vera, Hurdes o Plasencia. Los datos vaticinan un empuje del sector de lo más esperanzador.