Ana Palacio y Jeb Bush estuvieron días atrás en Crónicas marcianas soltando los consabidos disparates sobre la actualidad política. Eso al menos pareció, gracias a la antológica imitación que de ellos hizo Carlos Latre (Castellón de la Plana, 30-1-1979). Con tan sólo 24 años recién cumplidos, este portentoso imitador es la estrella de Sardá.

De crío, ya imitaba a Cruz y Raya, a Los Morancos y a Martes y Trece, consciente de que nació con ese don especial que combina un oído poco común y unos registros en las cuerdas vocales con los que hace maravillas. "Yo escucho mi voz en la cabeza igual que como sale de mi boca", le desveló a Julián García en este diario. En el colegio, brilló más imitando a los profesores que estudiando (no acabó el COU). Como quería ser periodista, aprovechó la oportunidad de trabajar de locutor en la SER de Reus (Tarragona) en el espacio Los 40 principales. Radio España fue su fichaje siguiente para hacer imitaciones. Y el tercer paso lo dio de la mano de Sardá, que le conoció en la presentación de un libro de Ricardito Bofill, al que, lógicamente, imitó como a tantos de su repertorio de casi 200 personajes.

De todos los modelos de Carlos Latre, hay uno que encaja tan mal la parodia que intentó en vano que fuese vetado en un programa de la televisión andaluza Canal Sur. Ese es Jesús Quintero, El Loco de la Colina.