TEtn el año 399 a.C., el filósofo griego Sócrates fue acusado y condenado a muerte por despreciar a los dioses y corromper a los jóvenes. Pudiendo evadir la condena y huir de prisión con la ayuda de sus amigos, decidió acatar la sentencia y morir envenenado por una copa de cicuta. Si Sócrates caminó hacia su destino de manera voluntaria pudiendo evitarlo, el actual secretario general de los socialistas extremeños, Guillermo Fernández Vara , también propone de manera voluntaria someterse al juicio de los suyos mediante unas primarias en el segundo semestre de 2014.

XES LA PROPUESTAx que se trajo el líder de los socialistas extremeños del congreso que su partido celebró el 24 de noviembre en el que sus compañeros de filas pidieron renovación y cambio generacional. Una pretensión puesta en práctica por Fernández Vara desde el minuto 1 de este nuevo partido en el que él mismo ha dado el pitido inicial como árbitro pero también será jugador decisivo para el devenir de la competición.

XPOR DELANTEx se plantea un año de acción política dual y social en el que el secretario general del PSOE extremeño tiene que trabajar no sólo por convencer a los suyos sino también por llegar a las elecciones de 2015, si finalmente se alza con las primarias, en las mejores condiciones de imagen y reputación entre los ciudadanos. Un doble reto simultáneo que bien puede reforzar su figura si consigue el apoyo de todas las partes implicadas en su elección o por el contrario puede llevarle a una retirada a tiempo.

XTRASx la llegada de la democracia y aquellos años locos de partidos atomizados, la empresa que se propone Vara es pionera en un dirigente político en la región. Una vez recuperado del sock electoral de 2011 y haber aceptado el papel de oposición, ahora le toca posicionarse como alternativa a la gobernanza de la región. Y aunque Fernández Vara estuvo cuatro años llevando los mandos de Extremadura, encara el objetivo de ganarse por primera vez la confianza de la mayoría. Visto que la fórmula de recorrer todos los pueblos de la comunidad no dio los resultados deseados, quizás opte por mecanismos de difusión más rentables y productivos que contrarreste la apisonadora del ejecutivo popular.

XCUANDOx lleguen las primarias y las elecciones tendremos la oportunidad de comprobar si el PSOE ha conseguido el beneplácito de los extremeños o si logra convencerlos de una solución mejor. Sobre todo comprobaremos si representa la frustración de los extremeños que Monago ha canalizado a base de transferir mayor responsabilidad sobre los propios ciudadanos y a base de una mejorada reputación de Extremadura en el panorama nacional. Obstáculos que se suman a la mala reputación de la clase política que el PSOE lleva aún a sus espaldas de ser el primer gobierno bapuleado por la crisis. Una valla que los socialistas extremeños podrán saltar si marcan diferencias con Rubalcaba o el que llegue en su lugar y defender los intereses y prioridades de nuestra comunidad, que son muy distintos a los de otras partes de España.

XSOLO EL TIEMPOx despejará las incógnitas que rodean al voluntario Guillermo Fernández Vara y especialmente si los extremeños están conformes con la gestión de José Antonio Monago y el Partido Popular. Por cierto, Sócrates despertó la desconfianza entre sus contemporáneos pero tras su muerte, creó escuela.