Ayer, en este mismo espacio, un ciudadano cacereño me tildó de independentista, y por ende a toda mi organización, Unidas Podemos. Ante esto, quiero dejar bien claro que NO apoyamos al independentismo, que no compartimos el delirio soberanista catalán, pero tampoco aplaudimos a aquellos que están utilizando un conflicto histórico como arma electoral para arañar votos. Somos la única fuerza política que en todos estos meses hemos actuado con responsabilidad y con sentido de Estado, abogando por la vía del diálogo. Estamos en contra de cualquier tipo de violencia y, por tanto, estamos muy preocupados por los últimos acontecimientos que se están produciendo en Cataluña a raíz de la sentencia del ‘proces’. Ésta ha demostrado que la judicialización de un conflicto político no es la solución. Hoy estamos muy lejos de una gestión democrática y de una solución política a la cuestión catalana. Sin embargo, Unidas Podemos hoy, con más fuerza si cabe, seguirá defendiendo el diálogo y la fraternidad entre regiones para superar esta crisis política y social. La situación en Cataluña necesita de calma y responsabilidad para reconstruir la convivencia y la concordia. Quienes jaleen, quienes echen más gasolina al fuego independentista con medias verdades, mensajes manipulados y duros discursos, posiblemente puedan ganar unos cuantos votos más el 10N, pero jamás conseguirán solucionar el conflicto.