LOS IMPRESCINDIBLES

Carta de gratitud

Manuel Lucas Rodríguez

En estos momentos en que, según los científicos que están haciendo el seguimiento de la pandemia, nos dicen que existen indicios racionales para entender que vamos por el buen camino, quisiera expresar mi agradecimiento a esos colectivos: Sanitarios, Policías, Guardia Civil, UME y otros muchos que con una vocación de servicio público encomiable, están poniendo en riesgo sus vidas para salvar las nuestras. Berthold Brecht hacía la siguiente clasificación de las personas: “ las que luchan un día son buenas, si lo hacen un año son mejores, si son varios años muy buenas, y si es toda la vida SON IMPRESCINDIBLES.” Estoy convencido que si nos preguntaran a todos en qué grupo encuadrar los profesionales citados, habría unanimidad en que sería en el último, en el de los IMPRESCINDIBLES. Por ello, me parece de justicia que en todos nuestros pueblos y ciudades, se pusiera el nombre de una calle, un parque, monolito… en un lugar destacado, para que cuando paseemos por ellos con nuestros hijos y nietos y nos pregunten, TODOS nos sintamos orgullosos al explicar el porqué.

TrAS EL CONFINAMIENTO

Cementerio en mal estado

Lourdes Lobato Rodríguez

Barcarrota

Vuelvo al pueblo después del confinamiento y como de costumbre visito el cementerio. Pero, ¿cuál es mi sorpresa? Las condiciones en la que me lo encuentro. Calles sin barrer, flores tiradas, tejas levantadas, hierba convertida en pasto en los tejados y paredes, pájaros haciendo nidos debajo de las tejas, alcantarillas con hierbajos.... Siempre ha brillado por su ausencia el mantenimiento de éste pero ahora pasa los límites. Entiendo que durante este tiempo ha estado cerrado y de ahí su máximo deterioro mas,¿ no es hora ya de que se encarguen de adecentarlo? ¿Acaso no merecen un respeto y que el cementerio esté limpio las personas que están allí? Si los que estamos aquí no nos hacemos el cargo, ¿quién si no? Somos, a comparación con los cementerios de los pueblos limítrofes, una vergüenza.

Carretera ex-209

Frenesí rotondil

Juan Fernando Ramón Sánchez

Torremayor

En España existen más de 80.000 rotondas y como no podía ser de otra manera, entre ella se encuentra la más cara de Europa, 50 millones del ala. No es de extrañar que este frenesí «rotondil» haya hecho mella en la Consejería de Movilidad, Transporte y Vivienda de la Junta de Extremadura, que tan bien nos gobierna, para construir otra en la EX-209 a su paso por Torremayor. Dicen que costará unos 700.000 euros del erario público, no se me ofendan profesores, sanitarios ni cualquier otro sujeto que se vea afectado por los recortes pues la señora Leire seguro que podrá explicar este gasto público a sabiendas que es una carretera que siempre ha carecido de bandas reductoras de velocidad, semáforos o radares que regularan el intenso tráfico que debió de motivar la construcción de esta rotonda. Aunque seguro que estas medidas de control de velocidad y del tráfico son menos onerosas para la res publica que la rotonda en cuestión. En todo caso, señora Leire gracias por la construcción de esta rotonda aunque hubiera sido preferible invertir en educación pública o que a nuestros sanitarios, tan alabados otrora, se le abonase la carrera profesional o el 2% de subida como en otras comunidades.

CRISPACIÓN POLÍTICA

Solo y desprotegido

Quim López

Castelldefels

Escucho a los políticos vociferar improperios, insultos en el Congreso y lo único que siento es pena y una sensación de caminar solo y desprotegido, además con la certeza que esto seguirá igual. Tomando como ejemplo a nuestro país vecino Portugal y su implicación en el control o solución de esta pandemia, siento que ellos sí tienen políticos responsables. Aquí solo desean coger el sillón y hacer uso de los poderes que se les otorgan. Les interesa tener a la sociedad en tensión continua y lo que pasa cuando estiras demasiado es que acaba rompiéndose la cuerda y siempre es por la parte más débil.