DEMANDA POR NACER

Nacidos a su pesar

Pedro Serrano // Antoñán del Valle (León)

Recientemente han sido noticia las declaraciones de un joven de Bombay por afirmar que demandará a sus padres por haberlo tenido sin su consentimiento. Al parecer, al ser preguntado por su estado, aseguró estar vivo, pero lamentándolo, porque, aunque adora a sus padres, él no pidió nacer.

El planteamiento de este joven puede parecer excéntrico, pero tiene mucha enjundia. Pues, aunque este dilema sea irresoluble, ello no es óbice para que podamos reflexionar sobre el mismo; al fin y al cabo, somos seres pensantes y hasta con un resquicio de libertad, cuando las leyes naturales, como es el caso, no la impiden. Es, pues, una lástima que los padres que quieran tener un hijo no puedan preguntar a éste si quiere nacer, pero, ante esa imposibilidad, que al menos se hagan la pregunta a sí mismos.

Me alegro por quienes, por diferentes razones, celebran la vida; pero sufro por aquellos que, a su pesar, han sido arrancados del confortable mundo de la nada. La naturaleza es terca y tramposa en su empeño por propagar la vida, pero si fuéramos más responsables, limitaríamos o, mejor, dejaríamos de añadir alegremente eslabones a esta cadena interminable de sufrimiento.

DÍA REIVINDICATIVO

8-M: La lucha no debe cejar

Miguel Fernández-Palacios Gordon // Madrid

En 1910, para exigir la igualdad de derechos entre mujer y hombre, la II Conferencia Internacional de Mujeres Socialistas acordó dar visibilidad a la reivindicación con la creación de un Día Internacional de la Mujer. El 19 de marzo del año siguiente, Dinamarca, Alemania, Austria y Suiza, celebraron por primera vez esta jornada con mítines reclamando el voto femenino y la igualdad. Pero no fue hasta 1975, coincidiendo con el Año Internacional de la Mujer, cuando la ONU decidió que el 8 de marzo fuera la fecha elegida para celebrar su Día Internacional.

Ya avanzado el siglo XXI, es inaudito que, aún quedando tanto camino por recorrer, debido al renacer de la ultraderecha en el mundo, mujeres y progresistas tengamos sobrados motivos para inquietarnos con el discurso retrógrado y manipulador de formaciones como Vox, y otras - «feministas liberales»- que se ven peligrosamente atraídas a su campo de influencia.

Ahora más que nunca, y porque la amenaza de involución es real, ¡ni un paso atrás!