¿Se podrían evitar lasmuertes de mujeres?
Las cuatro mujeres muertas en estos días a manos de sus maridos o parejas ha venido a ensombrecer el 50 aniversario que esta asociación celebra este año y por supuesto las 17 que en trágico récord van desde primeros de año.
Nos resulta inevitable comparar la situación en este aspecto de la mujer de entonces y ahora. Antes no se denunciaban los malos tratos, cierto, pero también es verdad que solo en raras ocasiones se llegaba al extremo de la muerte. También es verdad que el respeto al esposo ya de por sí heredado de tiempos inmemoriales hacía de la mujer no un ser respetuoso hacia el otro, sino un ser sumiso y dependiente en extremo.
Pensamos que las autoridades a quien corresponda, tienen que tomar enérgicas medidas. Por supuesto, ante los hechos consumados, pero también en la educación que están recibiendo nuestros hijos. Todo, absolutamente es un complemento y una suma de responsabilidades que debemos asumir ¿cómo no va a tener que ver la televisión en esto?, y los poderes públicos, precisamente en televisión un juez de Granada daba un decálogo en que uno de los puntos era que los padres, especialmente la madre, no debía llenar la cabecita de su niño diciéndole ¡eres el rey! Seguro que para ella lo es, pero los críos se lo creen y así asaltan a profesores, compañeras y a todos los que le lleven la contraria.
Otro punto de ese decálogo era no discutir el matrimonio delante del hijo y por supuesto que el padre no abrume con exigencias e insultos a su pareja.
Y... ¿qué nos dicen de la exitosa serie de televisión que tiene como tema las riñas de tres matrimonios?, ¿cómo queda la mujer?, ¡qué gran ejemplo a imitar!, y ¡qué horario!
No olvidemos que primero es la familia pero somos todos los actores sociales los que educamos. Si sembramos vientos, recogeremos tempestades.
Se necesita una reflexión seria sobre este grave problema. Sobre todo, que la liberación y promoción, hoy de las mujeres no nos cuesten la vida.
Centros de Cultura Popular y Promoción de la Mujer
Promoción de la Mujer
Día Internacional de la mujer: Es vejatorio.
Me pregunto para qué queremos nosotras ese título tan Internacional, si luego no se reconoce nuestro trabajo con el de los hombres, aunque tengamos el mismo puesto, pero no el mismo sueldo.
Me gustaría que no se tuviera que mencionar el Día de la Mujer, me parece vejatorio, como que nos quisieran hacer un favor, qué triste, de 365 días del año nos regalan uno... gracias, pero yo tengo que ser muy rara y especial, pues esto me parece de un gran machismo... porque me pregunto, ¿qué día es el Día del Hombre?...
Ellos no lo necesitan, porque aunque las cosas han cambiado bastante, siguen siendo los machos, y no necesitan que les dediquen un día, porque las decisiones importantes las deciden ellos, los sueldos por los mismos trabajo, los más altos son de ellos, si deciden irse un día de marcha no pasa nada, porque es muy macho... ¿pero y si se le ocurre a la mujer?... Es una perdida... Entonces para qué van a tener un Día del Hombre, si lo tienen todo el año. Y se me olvidaba que hay un Día de la Mujer Trabajadora.. Eso ya es de risa. La mujer trabaja en casa y fuera, pero aunque solo fuera en casa, no tiene horario, es sesión continua... Entonces todos los días del año son días de la mujer. Las trabajadores, las madres y amas de casa se merecen una medalla al trabajo, pero no un día de...
Y no digamos cuando una mujer ejerce un puesto de mayor categoría que el hombre, entonces se la mira por encima del hombre y aquí viene muy bien unas palabras que decía García Márquez: "He notado que todo el mundo quiere vivir en la cima de la montaña, sin saber que la verdadera felicidad está en la forma de subir la escarpada, he aprendido que el hombre solo tiene derecho a mirar a otro hacia abajo cuando ha de ayudarle a levantarse"...
Así que, hagamos un mundo donde seamos todos iguales. Viene Semana Santa, son unos bonitos días de reflexión, y a mí me gusta mucho pensar que para Dios sí somos todos iguales...
Mary Durán Calle
