El monopolio de la bondad

Ignacio Caballero Botica

En estos días de Pasión y sentimiento religioso me viene a la memoria todo lo vivido en este último año en relación al comportamiento de la jerarquía eclesiástica.

Tengo que reconocer que soy más creyente de la palabra de Eduardo Punset que la de Rouco Varela. Como diría Gila: "son amores distintos... y nos quedamos con la vaca".

Quizá sea porque en el caso del señor Punset los argumentos se plantean como una forma de dar a conocer unos conocimientos e ideas que pueden ser compartidas o no por las personas que le escuchan o leen. De hecho, ha realizado un enorme esfuerzo por acercar a la gente al lenguaje científico a través de explicaciones coherentes que no pretenden sin embargo imponerse.

En el caso de Rouco las cosas tienen más bien un tufillo a por el artículo 33 ; incluyendo esa idea tan reveladora que convierte a la palabra de Dios, en única titular de la bondad y verdad absolutas.

Siento discrepar de este segundo planteamiento de ver la realidad y a los que vivimos en ella. Porque la gente buena o la buena gente no es aquella que sigue necesariamente la palabra divina... sino aquella que respeta las diferentes formas de pensamiento y creencias de los demás.

El monopolio de la bondad y la espiritualidad no pertenece a ninguna religión, sino que reside en cada uno de nosotros. Porque el pecado y su reciente reciclaje a la versión 2.0, es una de las más antiguas formas de convencer a la gente a través del miedo, del castigo y del infierno... que sigue sin aparecer en las guías de viaje... al tiempo.

Ignacio Caballero Botica

La mosca que pica

No recuerdo que en el Ayuntamiento de Cáceres haya habido en ninguna legislatura una mosca de esas que pican en aquel sitio como en la actual corporación, llámese señor edil de Izquierda Unida, que en su derecho de opinión pica en sus manifestaciones. Entre sus últimos picotazos, el tema del Corte Inglés; ahora su ausencia en la representación municipal de la Semana Santa; lo próximo será en la bajada de nuestra Patrona ¿no? No la reciba en Fuente Concejo ni porte sus andas, no lo necesita. Todos sabemos en el equipo que usted juega, bien es verdad que por méritos propios o por aprovechar su minoría de votos en la actual coyuntura del ayuntamiento.

Señor Pavón, espero que en esta primavera, con la nueva floración, quede saciado y deje de dar picotazos. Es mi opinión. Respeto sus ideas y sus no creencias pero por favor no perturbe las de los cacereños.

Luis Chaves Romero

Katka en Telefónica

Teodoro L. Corchuelo Ardila