Un barriosin fiestas

Tiempos pasados siempre fueron mejores. ¡Y qué gran razón tiene el refranero! Antaño, las fiestas de las barriadas eran de los vecinos y para los vecinos, las comidas pagadas por los vecinos se las comían los vecinos, y después..., todos a bajar el frite a la verbena. ¡Ay, qué tiempos aquellos! Quizá yo me haya quedado anticuada o simplemente no comprendo el concepto actual de lo que es una "fiesta de una barriada" en la que: el frite popular es para los cuatro caciques del presidente de la asociación de vecinos; se llama verbena a un señor con un teclado y otro cantando (por cierto, dónde está la cabra); y las actividades infantiles son cuatro chavales con careta armando ruido por las calles, a lo que se le ha llamado charanga .

Olvidándonos por un momento de la ironía, creo que un barrio como el que ha sido Llopis Ivorra, se merece algo más que esto.

Antes, todos los vecinos sabíamos que había fiesta en el barrio, para todos los públicos había actividades y ocio por lo que mereciese pagar religiosamente todos los meses.

Llopis Ivorra ha pasado de ser una de las principales barriadas cacereñas a ser un barrio en el que ni tenemos infraestructura en condiciones, ni fiestas, ni ocio, ni existen programas de acción social. Podría seguir con una interminable lista, lo cual no sería competencia mía realizar, sino de aquéllos que utilizaron el barrio en su campaña electoral y de la asociación de vecinos, que para eso está.CAROLINA MOGOLLON. CáceresSe nos ha ido´Calerito´

Estamos en 1928. Gobierna en España el rey Alfonso XIII. En ese año nace nuestro amigo José Franco, en el seno de una familia humilde, como lo era el 96% de nuestro país. Una de las pocas maneras de cambiar, en cuanto a la calidad de vida, de mejorar la misma, era el mundo del toreo.

José Franco se acerca al mismo, puesto que tenía relaciones familiares con ese mundo, pero según nos contó él, el morlaco le dio un revolcón y le quitó las ansias de ser matador de toros, revolcón que a unos los lanza a la fama y a otros les marca en la distancia, como cuando uno se enamora de esa princesa que es inalcanzable. Así le pasó a José.

Se vincula a partir de entonces a los círculos taurinos de Cáceres, trabaja en el Múltiples y tiene tres hijos, dos de ellos funcionarios. Un hijo suyo es nombrado hijo predilecto de Cáceres, Franquete . Será porque se lo merece. Esta ciudad no es muy dada a reconocer méritos en vida a los nacidos en ella. Hace unos días se nos ha ido José Franco, pero no del todo. José Franco persiste en nuestra memoria y así lo hará mientras exista alguien que lo haya conocido.

Se fue Cúchares, se fue Manolete, se fue Paquirri y se ha ido José Franco, a quien me voy a permitir bautizar con nombre de torero, pues sus hechos le dan categoría para ello. Se fue Calerito . Sus amigos, entre los cuales tengo el honor de encontrarme, le echamos de menos en esta feria.JESUS BAÑOS COLLAZOS. Cáceres¿Dónde quedaron losbuenos propósitos?

El 14 de junio se constituyó la nueva corporación del Ayuntamiento de Badajoz. Durante toda la ceremonia reinó la armonía. El discurso de investidura del alcalde, lleno de buenos propósitos y de una buena disposición a la hora de ofrecer diálogo a la oposición, dos de las cosas que especialmente los que nos incorporamos por primera vez a esta tarea agradecimos enormemente. No han pasado 15 días aún cuando el alcalde decide lo que hará su equipo y las delegaciones que llevará cada uno sin contar con la oposición, y no es que necesite nuestra venia para ello, pero por respeto y porque nosotros no estamos ahí por gusto, o porque queramos hacerles la puñeta fiscalizando las labores que ellos lleven a cabo, sino porque hemos tenido un gran respaldo electoral y son los ciudadanos los que han decidido que así sea. Y en cuanto a mí, trataré de no defraudar a cuantos me hayan elegido para esa responsabilidad y desde la parcela que me corresponda velaré por los intereses de todos los ciudadanos, de todos los que me votaron y de los que no me votaron también.ANTONIA MARQUEZ ANGUITA. Badajoz