CARTAS AL DIRECTOR

No hace mucho se estrellaba un avión con 62 militares, y como resultado 62 cadáveres. Nadie parece acordarse de tal accidente, nadie parece haber hecho frente a esa responsabilidad, nadie ha tomado medidas aún para que esto no vuelva a suceder. Como siempre, son las familias las que están moviendo todos los hilos para evitar una tragedia de estas características y para tratar de que otras tantas familias no tengan que soportar ese mismo dolor. Mientras, llega la época estival y hablaremos de trivialidades, de los kilos que debemos perder para estar más monas, de la gente que llena los bares en Mérida a la hora del desayuno, del próximo cursillo al que pensamos apuntarnos en cuanto empiece septiembre, etcétera. Somos un país de pacotilla, nos olvidamos enseguida de las cosas, aunque haya cosas que puedan afectarnos a todos y que son evitables, si es que tomamos las medidas oportunas para que así sea, insistiendo en que la seguridad de los ciudadanos es fundamental, ya que en ello nos va la vida, esa vida que han perdido los que carecieron de esa seguridad cuando paradójicamente volvían de llevar a cabo tareas de ayuda humanitaria. De lo que no me cabe duda, es de que los máximos responsables de este tipo de cosas, como el señor Trillo, se alegrarán de que seamos tan superficiales, al fin y al cabo ellos salen beneficiados. Ahora se marcharán de vacaciones y como decía mi abuela: el muerto al hoyo y el vivo al bollo.

ANTONIA MARQUEZ ANGUITA. Badajoz

Circunvalación de

Casares de las Hurdes

Sigo creyendo que es una barbaridad la variante en Casares, ya que amén de perjudicar enormemente al pueblo por este desvío, innecesario, se malgastan enormes cantidades de dinero para su ejecución, con el agravante de estropear enormemente el paisaje de este bello pueblo de la Alta Extremadura como son las bellas vistas de los huertos de las humbrías y los gavilancitos, o hurto grande, como así lo llama Luis Guerrero. Creo que se trata de una cabezonería del señor director de las obras, pues acondicionando los poco más de doscientos metros de la travesía del pueblo quedarían en las arcas de la diputación fuertes cantidades de dinero, con las que se taparían otras obras de muchísima más necesidad. El aislar a este pueblo conlleva a que va a desaparecer a pasos agigantados, consecuencia de las malas inversiones de nuestra administración, las cuales realiza no sabemos a beneficio de quién.

Con una pequeña parte del dinero que se va a malgastar en la circunvalación, se comprarían unas pequeñas terrazas que se construyeron ilegalmente en los márgenes de la carretera y a sabiendas de la administración, pues el antiguo propietario vendió respetando las márgenes de la carretera. Sin entrar en polémica, sigo pensando que con el inicio de estas obras perjudican gravemente a quienes apostaban porque Las Hurdes tuvieran relevancia y fuera una tierra donde se pudiera vivir como en otras, por lo que no dudaron en invertir todos los esfuerzos de una vida, la que hoy vemos resquebrajar por las malas inversiones que se han llevado a cabo a todo lo largo del célebre Plan Hurdes y lo que le precedió. ¿Para qué quieren los hurdanos de Casares esas carreteras de exhibición, esas casas de cultura, esos monstruosos campos de fútbol o esas pistas polideportivas, si no tienen gente que las pueda utilizar? ¿Quién invierte en esta zona? Claro está que siempre hay algún tontorrón.

Señores de la administración, estudien ustedes la viabilidad de los proyectos antes de ejecutarlos y no nos confundirán en un mar de ilusiones que luego nos hacen caer sin posibilidad de volver a levantarnos.

ESTANISLAO MARTIN DOMINGUEZ

Casares de las Hurdes

Efectos colateralesen San Vicente

La falta de tacto y de rigor político del todavía alcalde de San Vicente, Gabriel R. Mayoral Galavís, han sido los principales detonantes de que el PSOE local se quede sin representantes en la Mancomunidad de Aguas Sierra de San Pedro y en la Asociación para el Desarrollo Sierra de San Pedro Los Baldíos. Tuvo en sus manos y rechazó un pacto de gobierno conjunto, por entender innegociable nuestra petición de acceder a la primera tenencia de alcaldía, cuando conseguimos 4 concejales y ellos 6 en las pasadas elecciones.

Nos alegó, falsamente, un total desinterés a la Mancomunidad desde San Vicente, argumentando que más que beneficios a nuestro pueblo le costaría dinero participar en ella.

Ofreció al Partido Popular su voto y nunca a nuestro grupo para la Asociación de la Sierra de San Pedro a cambio del voto de la Mancomunidad. Ahora se lamenta de que el grupo socialista se haya quedado sin representación en ambos órganos por culpa de la "pinza" PP-GIS-IU y que tendremos que explicarle ese pacto a nuestro electorado.

Nos parece, y creo que todos lo entenderán así, señor Mayoral, que muchos antes de que nuestra coalición explique el pacto que antes quiso hacer usted, lo que debería explicarnos a todos es por qué San vicente sigue a la cola de tantos servicios, también de la Mancomunidad con la gestión de ustedes, al cabo de más de 16 años en el ayuntamiento.

JOSE JUAN CUÑO MARQUEZ

San Vicente de Alcántara

Sobradosde paciencia

Por la misma razón pero con más asistencia, el martes día 15 se realizó en la localidad de Azuaga la tercera concentración ante el ayuntamiento, en protesta por los continuos robos, acosos y amenazas por parte de los miembros de una familia de etnia gitana.

No piense nadie que es por culpa del racismo, no. Llevamos años conviviendo con otras familias de la misma raza y nunca han existido enfrentamientos entre ellos y nosotros. El problema radica en que estos individuos, con sus insolencias, están colmando la paciencia de muchos y todo tiene un límite, poniendo con ello en peligro la tranquila convivencia que todos deseamos.

No se adaptan, no respetan lo ajeno. Han creado tal clima de temor y de incomodidad en el pueblo, que el vaso está a punto de rebosar. Y cuando esto ocurre, la actuación de aquél cuya propiedad ha sido saqueada, una y otra vez, es imprevisible.

Cierto que la miseria cambia los ánimos y echa por tierra las intenciones de buena conducta. ¿Qué me puede suceder? Como no tengo nada que perder...

Pero cuando uno se revuelve en su propia miseria y con unos padres que carecen de paternidad responsable, que cuando eran pequeños al llegar el día los echaban a la calle para ver qué podían apropiar de lo ajeno, el resultado está a la vista.

Importa, pues, que el pueblo vele por su seguridad, aunque a veces haya que tomar medidas drásticas, y poner el empeño al servicio de lo que es justo, para evitar atropellos.

Julio, nuestro alcalde, no está con los brazos cruzados. Está escribiendo, llamando, reuniéndose con los que legalmente pueden resolver la conflictiva situación. Sabemos que estas resoluciones son lentas, demasiado lentas; y tememos que mientras ocurra algún desagradable incidente. Pero si en nuestra libertad vamos reclamando justicia, no seamos a la vez injustos ante una persona que se ha encontrado con problemas heredados.

Por otra parte, si seguimos nostálgicos dando vivas al antiguo régimen, después de tanto anhelar la libertad, hay que sacar a la luz aquellas palabras de Machado: ¿Dónde está la utilidad, de nuestras utilidades?

JOSE GORDON MARQUEZ. Azuaga