Centro culturalpara Badajoz, ¡ya!

Ante todo quiero dar mi apoyo a la iniciativa de Amigos de Badajoz de que el Hospital Provincial de San Sebastian acoja la Biblioteca Central de la ciudad y el Archivo Histórico, convirtiéndose con ello en el Gran Centro Cultural de Badajoz. De esta forma se consigue dar un paso más por la recuperación del barrio antiguo y dotar a la ciudad de más posibilidades para ser, por ejemplo, capital cultural europea en un futuro cada vez más cercano.

En segundo lugar quiero expresar mi más sincero malestar a las instituciones y en especial al Ayuntamiento porque, situados en pleno siglo XXI, Badajoz sigue de ese necesario Gran Centro Cultura. Es asombroso y da vergüenza.

VICENTE MUÑOZ. Sollana (Valencia)

Incendiosforestales

Han pasado tres semanas del incendio devastador que asoló la comarca de Valencia de Alcántara. Estando ya en Barcelona (ciudad donde resido), donde en la última semana también ha habido incendios, veo con amargura las diferencias que nos separan.

Yo viví intensamente este incendio puesto que mis padres son de un pueblecito llamado Carbajo, que dista a unos 25 kilómetros aproximadamente de Valencia de Alcántara, dónde pasamos nuestras vacaciones año tras año y donde nos encontrábamos los días de los incendios. Además pertenezco a una entidad extremeña en Barcelona dónde promovemos todo lo relacionado con nuestra región, con lo cual estas cosas aún nos afectan más.

No encuentro explicación alguna al hecho de que aún sabiendo que los fuegos que asolaban Portugal estaban ya en la frontera de Cáceres, no se tomara ninguna medida de prevención desde la Junta.

No encuentro explicación alguna al hecho de que el primer avión que nosotros vimos pasar lo hiciera el día 3 de agosto a las siete de la tarde, cuando ya se hablaba de la posible evacuación de Valencia.

Pero supongo que todo ésto será contestado desde la Junta diciendo que se habían tomado todas las medidas oportunas. Incluso me atrevería a decir, pudiendo dañar alguna sensibilidad de los afectados, que la zona que se estaba quemando ya a última hora del domingo por la tarde no tendría el valor de otras zonas que estaban padeciendo incendios en nuestra región y que debido a ello llegaron los refuerzos más tarde de lo tendrían que haber llegado.

Lo que no voy a entender nunca es la falta de organización que hubo a la hora de coordinar a casi los 2.000 voluntarios que llegaron desde todos los pueblos a Valencia el domingo. Es inaudito que nadie, desde ninguna institución, bien regional bien estatal, supiera organizar a gente que podía haber sido más útil.

Me pregunto si es tan difícil haber hecho grupos que fueran o bien apagando fuego o bien haciendo los famosos cortafuegos. No soy ducha en la materia, pero me gustaría que aprendiéramos todos de esta lección porque, créanme, veo con amargura que en Cataluña en horas había seis o siete hidroaviones y que en Extremadura tardaran ni se sabe.

Aviones no hemos visto, pero yo tengo en mi retina la imagen desoladora de una tierra calcinada, de muchas vidas truncadas, gente que ha de empezar de nuevo. Espero que no se olvide la Junta de ayudar a esa gente, pero a los que lo necesiten de verdad, a los más necesitados, no a los que tienen esas grandes fincas que están comiéndose poco a poco el futuro de nuestra tierra.

Sólo me queda recordar y agradecer al alcalde de Valencia de Alcántara y a los alcaldes de la comarca (especialmente a los de Carbajo, Santiago de Alcántara, Cedillo y Membrío), la gran labor que han hecho al estar al pie del cañón, y que transmitan a sus vecinos su orgullo por la postura que han tomado al defender sus pueblos.

CLAUDIA MAGARIÑO. Barcelona