SUS OPINIONES

González, el enterrador

Martín Sagrera Capdevila

Madrid

Ya antes del 20D los dirigentes del PSOE confesaban lo evidente: que gobernar junto con el PP sería la muerte para su decadente partido. Dispuesto, tras una larga faena para debilitarlo, a darle la puntilla final y ser su enterrador, Felipe González no tiene pudor en pedir hoy que se abstenga y deje gobernar al PP. Culmina así su obra el "gracioso" que con su ejemplo enseñó al PP a burlarse de sus votantes, prometiendo todo al revés: paro, pensiones, OTAN... Sí: es el mismo que también fue el primer jefe de Gobierno en practicar la corrupción más insoportable, incluso tras su mandato, haciéndose consejero de la Endesa que había privatizado; el chaquetero que no sólo renunció a Marx, sino a toda justicia social; el señorito andaluz disfrazado de pana, al que su mismo mentor alemán decía: "¡Lástima que sea tan de derechas!". Adaptando una frase de su cómplice de trapicheos y corrupción, Alfonso Guerra, con su esfuerzo, a la democracia no la reconoce ya ni la madre que le parió.

FRAN RIVERA

Sacrificar a los hijos

Manuel Delgado Iriarte

Madrid

Muchos pueblos bárbaros sacrificaban orgullosos sus hijos a sus dioses. Yahvé premió a Abraham por estar dispuesto a sacrificarle el suyo. No es de extrañar que haya aún toreros, esos que se aman tan poco como para exponer su vida por dinero, que expongan también la de sus prójimos más próximos, sus propios hijos indefensos y tan frágiles como de pocos meses de edad. Hay que denunciar, pues, hasta obtener justicia, no sólo Francisco Rivera, sino otros toreros que se han solidarizado con su barbarie, mientras que no he oído a ningún torero que critique su salvajada. Caiga sobre ellos todo el peso de la ley, ya muy clara al respecto, y ayude este triste escándalo a terminar con ese vergonzoso espectáculo de sangre y muerte que mancha España, y cuyo rechazo entre los jóvenes es ya casi unánime.