JUSTICIA GRATUITA

Carta abierta a una juez

Angel Morillo Triviño

Castuera (Badajoz)

Esta misiva va dirigida, con el debido respeto, a la señora juez --titular o suplente-- del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Castuera (Badajoz), C.Z.B. Señora juez: Ha dictado usted un auto inapelable de denegación de justicia gratuita aplicando la misma ley que su colega A. T. P.-S. aplicó para concederla tan sólo hace unos cinco meses aproximadamente. Si tanto mis ingresos como mis gastos no han cambiado en apenas unos euros, no se explica de ninguna manera su decisión. Salvo que, supuestamente, esta venga dada porque ahora no se trata de una simple demanda de menos de tres mil euros como era la que había que dirimir cuando se me dio la razón, sino de una denuncia contra dos letrados por "deslealtad profesional y obstrucción a la Justicia" que es un delito penal. Así pues, sólo sería explicable su denegación si de lo que se trata es de "proteger" (entre comillas, que no quiero líos) a esos dos individuos que, a su vez, cometieron el delito por el que están denunciados por tratar de, así mismo, "proteger" a un más que posible alcalde corrupto (ya investigado por tráfico de influencias). ¿Ha querido usted, quizás, "colaborar" (de nuevo entre comillas) para que la cosa no pase a mayores y las denuncias del alcalde sigan "dormidas" plácidamente? Como quiera que sea, no importa señoría, yo voy a seguir "importunando" al Juzgado que corresponda hasta que el sueño acabe, que no lo dude usted, un día acabará. Pero, respetuosamente, no debe usted olvidar que forma parte como funcionaria del servicio que este país debe prestar a los ciudadanos mediante el "contrato socia", que nos cuesta más impuestos que a ningún europeo, y que cada vez que votamos firmamos con el Gobierno. Hay que cumplir ese contrato (aunque ningún gobernante, por su parte, lo haya hecho dignamente desde que empezó la Democracia) si queremos que todo cambie, sobre todo la Justicia, un poquito al menos. Además, tampoco debe usted olvidar que hay una Justicia que esa sí que es siempre inapelable y que se llama destino. Ojalá que éste le sea a usted más favorable de lo que la Justicia que usted aplica ha sido conmigo. Mas, como le he dado a entender antes, no cuente que me vaya a rendir. Y aunque a usted, por los hechos es fácil de suponer, no le gustaría, por encima de su juzgado hay otros tribunales, con otros jueces.

FERNANDO ALONSO

Una vida menos

María Faes Risco

Madrid

Fernando Alonso, tras su accidente, reconoció que había gastado "una de sus vidas", pudiendo contarlo por la "seguridad de estos autos". Quizá ha llegado por fin la hora de que piense en los miles de conductores que acaban con su única vida así.