El pasado día 17 de marzo de 2007, la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH) de Mérida y Comarca, realizó un enterramiento simbólico en las tapias del cementerio emeritense, este entierro se conformó en dos partes: una laica y otra católica, en memoria a las personas que fueron asesinadas en las tapias de dicho cementerio.
Se contó con la adhesión al acto, a través de documentos escritos de la Comisión Etica Internacional de Colombia, de la cual forma parte la ARMH de Mérida junto a 24 personas y organizaciones de diferentes lugares del mundo, la Comisión contra la Tortura de Chile, Madres de la Plaza de Mayo-Línea Fundadora, SOA Close, MST, Pérez Esquivel (Premio Nóbel de la Paz),- se contó con la adhesión de la Red de Alternativas contra la Globalización de Mercado y la Impunidad, Comisión Intereclesial de Justicia y Paz,-
En este sentido, queremos hacer público el agradecimiento al padre Guillermo, de Mérida, párroco de la Barriada de Santa Eulalia, por ser quien rezó un responso por los allí enterrados, un Padre Nuestro,- dando Paz, no sólo a las almas de los cristianos que también fueron fusilados en la barbarie de la represión en la toma de Mérida como en la dictadura que siguió a nuestra terrible guerra, si no también a las personas de bien, que vieron en este gesto, un acto de tremenda bondad y humanidad por parte del padre Guillermo, quien sin entrar en más cuestiones que las meramente humanas, que son las que siempre han movido a la asociación, se sumó a este acto.
Muchas gracias, padre Guillermo, en nombre de la ARMH de Mérida y Comarca por sumarse a la petición de un entierro digno para los restos que se encuentran sepultados en las tapias del cementerio emeritense, que fueron personas, padres, madres, hijos, hijas,- y hubieran sido grandes abuelos de no haber perecido de esta forma.
Sus familiares, no les olvidan.
Libertad Sánchez Gil **
Portavoz de la ARMH de Mérida y Comarca