Aunque a algunos pueda parecerle escasa la cifra que maneja el Ayuntamiento de Cáceres en torno a la reducción del tráfico en la ciudad monumental y que se sitúa en un 25%, lo cierto es que estos datos vienen a refrendar el destacado esfuerzo que en este sentido ha realizado el consistorio cacereño para liberar de vehículos la parte antigua, sin duda, la joya arquitectónica más importante de la capital y una de sus principales fuentes de ingresos. Un proyecto como el que hace seis meses puso en marcha el equipo de gobierno de José María Saponi no siempre tiene consecuencias inmediatas, como se ha demostrado en otras ciudades patrimonio de la humanidad, que también han liberado de coches sus recintos intramuros.
Sin embargo, el ejemplo de civismo que han dado los vecinos, el esfuerzo que ha realizado el Centro Municipal de Tráfico y el empeño de la administración por hacer más vivible y transitable el casco histórico, están dando por fin sus frutos. Pero este esfuerzo no puede quedar ahí. El ayuntamiento debe arbitrar ahora las medidas necesarias para seguir avanzando en la peatonalización, sin olvidar la necesidad de buscar aparcamientos que sirvan de alternativa.
