En Educación todo suma y no todo es maestros, alumnos y libros, los municipios, los centros escolares, sus edificios incluso sus aulas, también son importantes por sí mismos e influyen en el clima educacional y en las relaciones académicas, interpersonales y laborales. Nadie duda de la relevancia que para con el desarrollo de nuestros alumnos tienen las condiciones espacio-temporales, ambientales y sociales que rodean a un centro educativo. De entre ellas, las espacio-temporales que también pueden influir en las ambientales, no son las más difíciles de cambiar, a veces basta con euros, a veces además necesitan de voluntad política, a veces de un signo, a veces de otro, incluso de ambos, no fuera a ser que por unos y por otros, la casa se quede sin barrer.

Sí, los procesos de enseñanza-aprendizaje pueden verse influenciados por el ambiente que reina en el centro, donde las condiciones edilicias --edificación y construcción-- equipamiento, la existencia de espacios alternativos y la escuela misma, entendida como continente, tienen su importancia en el contenido, pues inciden en la motivación y desarrollo del alumno e incluso en el trabajo del docente, pues es evidente que el centro escolar y el aula es donde éste sufre el mayor desgaste físico y psíquico. Esas condiciones del espacio físico requieren de ciertos mínimos como el funcionamiento espacial, mecánico, higrotérmico, hidrófugo y acústico. No es que me haya dado por la construcción, pero ayer volví a pasar por uno de esos centros escolares por los que nunca pasa el tiempo; bueno... el tiempo sí que pasa, el del reloj y el atmosférico, basta ver sus techos, los que no se han caído. Gracias a Dios no es una imagen muy habitual en nuestra región, pero a pesar de las demandas, casi ruegos, por parte del centro, alguien debiera realizar una reforma, obra, o mantenimiento digno, que no llega por ningún sitio, ni municipal ni regional.

Como decía antes, un edificio necesita de unas condiciones mínimas para ser un centro educativo, y existen unas prioridades y necesidades, y un requisito no puede ser esperar el orden de una lista alfabética, porque con los cambios de gobierno, nunca llegamos a los centros que empiecen por Z.