Hay obispos de verbo fácil, peleón y a menudo vergonzante. En los últimos tiempos, tuvimos ocasión se sufrir frecuentes invectivas de algunos de ellos ampliamente difundidas por los medios, como: «El erotismo hace difícil respetar a los niños» o «hay menores que desean el abuso e incluso lo provocan», entre otras muchas igualmente lamentables. Desde la publicación del escándalo de pederastia masiva en Estados Unidos --cientos de curas depredadores, más de mil niños abusados-- he esperado alguna declaración de estos altos cargos de la Iglesia, tan dados a vocear contra los gays y el aborto, condenando los terribles delitos. Sin ningún éxito. En cuanto a la carta del papa Francisco pidiendo perdón desde la vergüenza y el arrepentimiento, ¿es suficiente? ¿Hemos de olvidar su reciente actuación en Chile? Una de las terribles reflexiones que estos hechos repugnantes me imponen es: si esto ha ocurrido en los últimos 40 años en Pensilvania, ¿qué no pudo ocurrir en otros territorios y en otras épocas? ¿Qué no pudo pasar, por ejemplo, en la muy católica Europa en esos mismos 40 años, o en los 100 o 300 años anteriores? ¿Cuántos niños pudieron sufrir abusos en aquellos oscuros y reprimidos años? ¿Cuánto dolor repartieron? Y las preguntas inevitables son: ¿Dónde queda la supuesta superioridad moral y ética de la Iglesia católica con la que siempre se han impuesto a la sociedad? Y otra pregunta más: ¿Qué piensa hacer esa misma Iglesia para reparar tantísimos crímenes?
INMIGRACIÓN
Los recursos de África
Juan Jiménez
Plasencia
Parece ser que España ha tomado el relevo de Italia en la acogida de inmigrantes procedentes de África. Cada día vemos como entran en la península pateras llenas de personas ansiosas de encontrar todo aquello que no tienen en sus respectivos países. Preguntas como: «¿Qué haremos con ellos?» salen de la boca de la gente. Hay preocupación. Por otra parte, la UE quiere hacer una política común con el fin de integrar a los inmigrantes en todos los países de la Unión. Invito a reflexionar sobre ¿qué han hecho los países de occidente en África que no sea sacar de ella todos los recursos que nutren sus industrias? Hablo del petróleo, gas natural, oro, diamantes, plata, bauxita, cobre, hierro, plomo... ¿No se les debería caer la cara de vergüenza? ¿Qué tendría que hacer Occidente para remediar todo el daño que ha hecho en África y demás países del denominado tercer mundo? Simplemente, crear industrias, escuelas o universidades. En pocas palabras, occidentalizar África. Dudo mucho que el mundo occidental se deje tomar el pelo. Si Occidente no hubiera explotado tan vilmente todos estos estados africanos, posiblemente hoy tampoco deberíamos hablar de terrorismo.
TRÁFICO
Móviles al volante
Valentín Camprubí
Valencia
El director de la DGT, Pere Navarro, tiene mucha razón cuando afirma que un tanto por ciento muy alto de los accidente de tráfico tiene como causa la distracción por el uso de móviles y GPS mientras se conduce. Y que de alguna manera, estos artilugios tecnológicos deberían incorporar sistemas para que no pudieran ser manipulados mientras se conduce. En esta cruzada deberían ir de la mano de los fabricantes de coches, pues si no se alían para paliar el problema, no habrá nada que hacer. Por ejemplo, que al poner en marcha el vehículo, automáticamente el móvil o el GPS se pongan en modo avión y no se puedan utilizar. Pero yo diría que ni unos ni otros están por la labor, pues los vehículos nuevos ya hace años que llevan incorporada una pantalla multimedia, con más funciones y con más conexión-interacción con el smartphone. Por lo tanto, creo que es una batalla perdida, y esta lacra que es la pérdida de vidas y de personas que quedan lisiada debido a los accidentes de tráfico, irá creciendo. Triste, muy triste.
