Tienen derecho a saber la verdad. Los familiares de los fallecidos por coronavirus en las residencias extremeñas, que han muerto en la más absoluta soledad, tienen el derecho a conocer las respuestas a sus preguntas porque, aunque no hay consuelo para la pérdida, conocer la realidad de lo que ocurrió puede ayudar a que cicatrice la herida.

Es necesario, también, el no volver a repetir errores y estar preparados para cualquier situación, y para ello, se debe analizar la gestión sanitaria y conocer todas las actuaciones que se llevaron a cabo desde el principio de la pandemia. ¿Por qué casi el 90% de los fallecidos en Extremadura han sido mayores residentes en esos centros? Todo controlado, decía el consejero Vergeles mientras que los profesionales que trabajan en las residencias asistían impotentes a la desidia de la Junta, que no les dotó de medios de protección ni de apoyos para luchar contra el virus dentro de esos muros.

Pues no estaba controlado, no; los fallecimientos (los que se han contado y los que no), las quejas de los familiares que han llegado hasta la Asamblea de Extremadura, las investigaciones abiertas por la Fiscalía y el suspenso con el que han valorado los sanitarios extremeños al SES, así lo confirman. Además, si hubieran tenido todo bajo control, la Junta estaría segura de su buena actuación y no tendrían nada que ocultar, por lo que no se opondrían, como ha hecho el PSOE, a crear una Comisión de Investigación sobre lo ocurrido en las residencias en la Asamblea de Extremadura

Esta Comisión, propuesta por el PP, pero respondiendo a la petición de las familias de la Asociación de Damnificados de la Asistida, debería ser ineludible en Extremadura donde hemos tenido el segundo mayor índice de España de letalidad en residencias, después de Aragón. El caso más evidente es el de la Residencia Asistida ‘El Cuartillo’ de Cáceres, donde noventa y tres personas han fallecido y donde se ha notificado hace unos días un nuevo positivo después de haber anunciado que estaba libre de covid. Conocer cómo es posible que vuelva a haber positivos en una de las residencias de mayores con más letalidad de España, respalda la necesidad de una comisión de investigación.

¿Cómo se puede justificar el rechazo de los socialistas a conocer la verdad? Se excusan diciendo que preguntar por lo ocurrido es hacer política con los muertos, cuando la Junta ha ocultado la cifra real de fallecidos con el único fin de minimizar los efectos reales de esta pandemia en su propio beneficio, y acusan de bajeza moral a los promotores de la Comisión, que no son otros que los propios familiares que están en su derecho de saber qué ha ocurrido realmente y quién es responsable de ello.

No quiero imaginar qué haría yo si me enterara de que algún ser querido estaba enfermo por coronavirus, justo en el mismo momento en que me llamaran para decirme que había fallecido. ¿Qué harían ustedes?

*Ingeniera técnico agrícola y diputada del PP.