Me sentí ofendido y agraviado al estar ante mi televisión el pasado sábado, en Canal Plus, viendo la retransmisión de una pelea de boxeo entre el español Javier Castillejo y el uruguayo Enrique Campos. A la hora de presentar a los dos púgiles, uno de los comentaristas, para calificar al latinoamericano y para hacer una idea a la audiencia de su valor en dicho deporte, calificó con un trato despectivo a dicho boxeador, haciendo la comparación, por ejemplo, como si habláramos del campeón de Badajoz. Como abonado a dicha cadena, creo que habría que medir un poco más los comentarios, dado que con ello se sigue sembrando, injustificadamente, cuestiones que no tienen ninguna razón de ser, porque es incierto el por qué serlo y con toda seguridad no las son. FEDERICO J. MARIN Jerez de los Caballeros