DOS MAX

Ocurre con el teatro que pasa inadvertido (y hay que escribir frases como la que acaban de leer para que alguien siga prestando atención). Sucede que acaban de darle un Premio Max de Teatro 2003 por ser el mejor actor de reparto al extremeño Juan Margallo, que está sensacional en Pareja abierta , y no merece casi ni un comentario en las páginas y programas de nuestros medios de comunicación (es que el Papa copaba, oiga, y el Rey con Trillo, y Aznar en la Granadilla, oiga) y pasa que Margallo se fue a Madrid pero trabaja en Extremadura y en Madrid, (¿se acuerdan de quién ha dirigido a Suripanta en Woyzet o quién está dirigiendo el montaje extremeño La Paz que abrirá el Festival de Mérida?, pues Margallo, oiga) y aquí nos quedamos con Alfonso Sastre y la polémica de su Max honorífico.

Margallo subió junto a Flotats y otros insignes a recoger su Max. Margallo ha capitaneado las movilizaciones contra la guerra de Irak y se ha puesto detrás de las pancartas (esas pancartas que según Aznar sólo las mueve Zapatero ignorando a los miles de ciudadanos que ponían sus manos en las telas) pero no le han dado el Premio Max por eso (Sastre se ponía detrás de las pancartas que pedían el acercamiento de los presos de ETA al País Vasco y nunca lo hizo para repudiar-repugnar los asesinatos que salpicaban de sangre su pancarta) le han dado el premio por ser un excelente actor y hombre de teatro. Pareja abierta recorrió algunos teatros de Extremadura y el público sabe bien por qué le han dado el premio. Igual con una televisión extremeña la noticia hubiera merecido algo más, pero esto es lo que hay, o no hay, ya que TVE tenía mucho trabajo con el Papa y la Niña Pastori.