Lo estaba oyendo y no me lo podía creer.

Resulta que algunos empresarios (parece ser) no admiten a trabajadoras que padecen cáncer de mama. Bueno, si esto es verdad, no sé qué conciencia tendrán dichos señores.

El cáncer de mama, señores empresarios, gracias a Dios y a la ciencia, y a muy buenos médicos que tenemos, se cura en unas cifras muy elevadas, y cada día más, ya no es como antes que decían cáncer y equivalía a muerte, eso ha cambiado para suerte de las que tienen esa enfermedad.

Yo soy voluntaria de la Asociación Española Contra el Cáncer y visitamos en el hospital a enfermas y les puedo asegurar que cuando acaban sus ciclos y el proceso de su enfermedad vuelven a ser personas como cualquiera, haciendo su vida normal... ¿Y ustedes se atreven a negarles un trabajo para que lleven mejor su vida?

Señores empresarios, estoy indignada, si esto es verdad, que lo será pues a mí no me lo ha contado nadie lo he oído en las noticias, tienen muy poca calidad humana, muy poca caballerosidad, muy poca o nada caridad cristiana. Perdonen, ¿son cristianos?

¿No han visto el caso de Sheila Moreno, que tras superar un cáncer de mama ha cruzado el estrecho a nado? La vi en televisión contenta, valiente, dijo que tardó cuatro horas en cruzarlo, ¿qué les parece?

Es vergonzoso, ojalá que nadie de su familia padezca esta enfermedad nunca, yo así se lo deseo, pero para mí... a ustedes no les tengo ningún respeto.

Bravo por ti, Sheila, tenías la vida en tu cara, eres un ejemplo para todas las que pasan por ese trance, ánimo amiga, un abrazo.

Mary Durán Calle **

Cáceres