El debate social sobre la energía nuclear ya se ha abierto en Extremadura. Agradezco a este periódico haber dado proyección mediática a este asunto con el artículo del pasado domingo titulado Del nucleares no a plantear más centrales porque recoge unas evidencias que no podían ser silenciadas. Es tiempo ya de perder ciertos prejuicios. Es tiempo ya de apostar decididamente por dar un impulso claro a nuestras potencialidades. Algún partido político cambió no hace mucho su posición sobre el desarrollo industrial de Extremadura y la instalación en nuestra tierra de industrias a las que antes mostraban su rechazo. Ese cambio de postura electoralmente no le ha ido mal. Pues ahora se trata de volver a ejercitar ese cambio de paradigma por parte de los dos partidos mayoritarios de la región.

PSOE y PP han de actuar en función de las prioridades que marque la realidad y no por ficciones producidas por ideas fantasmagóricas.

Soy de los que defiendo la necesidad de impulsar el desarrollo de la energía nuclear en España y, obviamente, también en Extremadura (no sería mala idea reabrir Valdecaballeros y aumentar el número de unidades de Almaraz); las nuevas tecnologías ya nos permiten tener reactores nucleares diseñados y destinados a reciclar y reprocesar residuos radiactivos. Por eso vería con muy buenos ojos que el ATC (Almacén Temporal Centralizado) se ubicara en Albalá: Investigadores españoles del Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas (CIEMAT) han creado un reactor nuclear para reciclar residuos radiactivos. Propondrán su ubicación junto al futuro Almacén Temporal Centralizado (ATC).

Javier Caso Iglesias **

Plasencia