No sabemos si a Trillo le han ocultado datos o si Trillo los ha ocultado a los demás, pero nos dijo que no había recibido ningún tipo de queja sobre el transporte áereo de los militares españoles a Afganistán y El País publica hoy que el jefe de la misión, el teniente coronel José Ramón Solar, fallecido en Turquía en el accidente del Yak-42 con otros 61 militares, ya había denunciado con todo lujo de detalles las malas condiciones del viaje de ida, cuatro meses y 10 días antes". Así arrancó ayer Iñaki Gabilondo la tertulia de la SER.

Para Miguel Angel Fernández Ordóñez, "el asunto es gravísimo, aunque en este país al engaño no se le dé la importancia suficiente y no dimita nadie por eso". Gabilondo inquirió por qué, a diferencia de EEUU y Gran Bretaña, en España el engaño del gobernante era considerado un tema menor. Fernández Ordóñez dijo que en esos países "la mayor traición democrática es el engaño, porque eso impide juzgar: si el político no da los datos mal se puede enjuiciar... No nos damos cuenta de que el engaño, la mentira y la manipulación de los datos es algo inaceptable". Javier Tusell apuntó que "quizá Trillo no mintió, pero eso es aún más estremecedor, porque supondría que no ha funcionado la cadena de mando". Y Juan Tapia acabó: "Si el Gobierno quiere que España sea una potencia de segundo orden, debe tomárselo en serio; el ministro de Defensa y el presidente deben trabajar para resolver los problemas con eficiencia, pero no: en todos los ámbitos se hace un discurso de patrioterismo barato para cubrir la ineficiencia".