El Mundial 2013 sube hoy el telón para demostrar que se pueden organizar unas pruebas de primer nivel con sobriedad pero con todo el lujo de la alta competición deportiva y de espectáculo cinematográfico. Barcelona regresa, de esta manera, a la primera fila de la atracción mundial, desde hoy y hasta el próximo 4 de agosto, con la experiencia del Mundial del 2003 y la de diversas citas de carácter global que consolidan a la ciudad como un referente. Para Barcelona, cuya imagen urbana será vista por un público a veces de hasta 3.500 millones de espectadores, el presupuesto del acontecimiento, de 26 millones de euros, será más que rentable, ya que se espera un retorno de cinco euros por cada uno invertido, teniendo en cuenta todas las variables. La actividad económica de la capital catalana se disparará en plena época veraniega. Acontecimientos así son los que hay que negociar porque son los mejores para promocionar una tierra.
