TLtas deslumbrantes y espectulares concentraciones de masas, son, con frecuencia, la otra cara de la soledad, el contrapeso y el símbolo de ciertas vaciedades y retrocesos en los que el hombre actual se debate.

Asistimos a una grandiosa congregación de personas en Valencia, con la venida del Papa, un encuentro que puede leerse como una magna concentración de fuerza de la Iglesia Católica, sin dejar por ello de ser también un claro desentendimiento del individuo. Y es que en la época de la comunicación, éste está más solo que en otras anteriores, en la era de la participación, se le ha alejado de toda toma de decisiones y en la sociedad de la libertad, está más despersonalizado que nunca.

Estos acontecimientos masivos surgen como una necesidad cuya razón de ser estaría precisamente en el gigantesco proceso de vaciamiento de doctrinas y contenidos, tanto en lo religioso como en lo ético, en las configuraciones culturales, sociales y políticas que se están produciendo y que están causando la pérdida de todo poder de convocatoria porque sus grandes palabras y sus referencias sólo aportan vacuidad a la vida diaria.

En el caso concreto del Papa, ¿solucionaría su venida la situación en que viven cientos de católicos separados que tienen una familia en nada coincidente con el modelo eclesiástico? ¿Se aproximarán las concepciones sobre el sexo, la igualdad, la autonomía y la libertad de la mujer en la sociedad actual a las concepciones de la Iglesia? ¿permanecerán incólumes, con este acercamiento al pueblo, los conceptos de modelo de matrimonio monogámico e indisoluble que la Iglesia mantiene frente a las diversas formas de familias emergentes? ¿Seguirán en fin, recriminados, acusados de concubinos y apartados de los demás sacramentos los divorciados?

Nadie lo sabe como nadie sabe si tras apagarse los focos el individuo volverá a su soledad y a su frío. Estos deslumbrantes espectáculos son simplemente bullangueros, porque están sometidos a una severa ley física: la mucha luz es como la mucha sombra: no deja ver.

*Licenciado en Filología