TEtl término esquizofrenia procede del griego schizo , que significa escisión o división y, desde ese aspecto meramente etimológico, la mayoría de las personas somos algo esquizofrénicas por la necesidad de dividirnos, de adaptarnos a los papeles que nos asignan las circunstancias. Claro que no es lo mismo pasar del papel de padre al de marido, que del de tiburón de las finanzas a pretendiente cursi que se quiere llevar a la habitación del hotel a una de las secretarias.

Hay casos más complicados. Pienso, por ejemplo, en lo que debe ser pertenecer a Ezquerra Republicana y tener un cargo en el gobierno de la Generalitat. Formar parte de la Administración del Estado y, a la vez, sentir repugnancia por un Estado cuyo jefe es el Rey. No mostrar ningún entusiasmo por un estatuto que rechazaron, cuando se votó, y tener que atenerse, en el trabajo de cada día, a ese estatuto. Otrosí, que al estar ese estatuto sometido al criterio del Tribunal Constitucional, ese estatuto que tanto les desagrada, amenazar con una revuelta si se le toca una coma. ¡Qué tensión! Y, no sólo eso, gobernar con unos socios con los que tienen que votar en contra del otro partido nacionalista y, a ratos, ofrecer pactos a ese partido nacionalista para un futuro gobierno que derribe el actual del que forman parte. No me digan que no es admirable y no se requieren unas aptitudes que son difíciles de encontrar en ciudadanos normales. Los hay incluso que son partidarios del movimiento okupa, y, a la vez, tienen que mandar a los agentes de la autoridad para desalojar a los okupas de algún inmueble asaltado.

Sólo personas de gran temple, de una enorme y rara versatilidad, pueden ser capaces de llevar sobre sus hombros tan pesada carga. Debe ser algo así como ser profesora de Religión por las mañanas y puta de cabaret por las noches, guarda de seguridad de entidades financieras por las noches y atracador de bancos por las mañanas. Esquizofrenia ¿sólo etimológica?

*Periodista