El Gobierno, basándose en la promesa realizada a los electores en los últimos comicios, reformará el Código Civil para poner en marcha el Estatuto de los españoles en el mundo, conocido popularmente como Estatuto del emigrante . El objetivo de ese proyecto de ley es mejorar los derechos de los miles de españoles que residen en otros países de que mantendrán la nacionalidad sin que se le pongan tantos obstáculos como hasta ahora.

La propuesta socialista comenzará a verse mañana, pero la Junta ya ha anunciado que está a favor de dicho estatuto, ya que complementa la actual Ley de Extremeñidad, que regula los derechos de nuestros paisanos en el exterior. De esta manera, los más de 20.000 extremeños repartidos por el extranjero tendrán garantizado por ley que sus descendientes hasta segundo grado tendrán derecho preferente para adquirir la nacionalidad española sin ningún tipo de discriminación, o que podrán retornar a España en cualquier momento. De esta forma, la norma estatal se solidariza con quienes hace décadas tuvieron que emigrar porque aquí no encontraban oportunidades para sacar adelante a sus familias. Por ello, es justo que esos hijos de la diáspora tengan los mismos privilegios que quienes tuvimos más suerte y no debimos salir de la región.