Qué placer me provoca ver como mi Badajoz histórico se reactiva; qué placer ver sus calles y plazas satisfaciendo traseúntes por su oferta, sea culinaria o de otro tema; disfruto observando que hay iniciativas varias y continuas desde nuestro barrio viejo.

Ahora la Feria de la Tapa, qué bien. Felicito a la organización por llevar a cabo un evento más con el fin de atraer vida a nuestras piedras. Todo esto sería genial si fuéramos más serios y responsables. Desde el pasado 4 de noviembre he repetido visitas y degustado tapas (donde pude). En algún local el viernes 4, sábado 5 o domingo 6 a diferentes horas traté de probar su manjar, imposible. Por fin el martes 8 lo hice, pero qué lástima, estaba fría. En otro lugar, el mismo día, en torno a las 21.00 no había tapa, en otro nuevo se había terminado su ternera a las 14.30 de un miércoles 9, en otro su ave parecía disecada, en otro degusté una estrella que más que col era una sábana... En fin, no todo son sinsabores, existe algún lugar nuevo, creo, y un tanto extraño a priori, donde me deleité con su oferta cuadrada de cerámica Tropical colorida , incluso un domingo a las 00.30. Decir de este espacio que tras siete visitas no pude felicitar a su responsable (no está), lo cual lamento. Su oferta me parece profesional, rica en imaginación, gusto y estilo; además de provocar una digestión amena con su música.

DANIEL SEBASTIAN PEÑAS SANCHEZ. Badajoz