Hay machismo en algunas señales de tráfico, dice la Fiscalía General del Estado. La conclusión es resultado de examinar la seguridad vial desde la perspectiva de género y detectar que “hay señales que representan a un hombre como peatón o conductor”, de donde se deduce que “todavía perviven señalizaciones contrarias a los principios de igualdad”. Lástima que esas señalizaciones se reduzcan a dos: la señal que indica el punto de partida para hacer senderismo, en la que la figura de la mujer sigue a la del hombre (textual: “mujer sigue a hombre senderista”, en lengua sioux), y la señal que avisa de la proximidad de un centro escolar, en la que la figura de la niña no solo va detrás de la del niño sino que además la del niño la lleva de la mano (textual: “niño que lleva de la mano a la niña, que va detrás, ambos al colegio”). En las dos señales, dice la Fiscalía, “la mujer aparece en una situación de dependencia y subordinación”.

En paralelo, hay agresión sexual en una mirada lasciva y en un comentario ofensivo y en una insinuación inapropiada, según el Ministerio de Igualdad. Estos tres casos no son únicos, sino que hay también agresión sexual si se envían fotos o imágenes sexuales a una mujer, si las sugerencias para tener una cita con ella son inadecuadas, si se la obliga a ver material pornográfico, si ella advierte contacto físico no deseado o si sufre amenazas laborales por negarse a propuestas o “avances” (sic) sexuales. Lo que hace únicos estos casos es que todos surgen de las preguntas realizadas a 9.568 mujeres y se incorporan a la nueva definición de “violencia machista” que propone el Ministerio de Igualdad, pues constituyen “una violencia oculta no suficientemente denunciada”. ¿Quiere decirse que la multiplicación y variedad de agresiones pretende acabar con “las bajas tasas de denuncias”?

Cuando la frivolización procede de las instituciones es muy difícil reconocerla, porque “cómo va a frivolizar el Estado”, se razona, “y menos con cosas tan serias”. Y, sin embargo, frivolización es que se atribuya machismo a señales de tráfico, y que el argumento sea que la figurita del peatón o conductor es un hombre. Y frivolización es que la lucha contra la violencia machista consista en añadir nuevos supuestos de violencia, como si el objetivo fuera demostrar, por acumulación de casos, que esa violencia existe, y como si no la demostraran cada día mujeres maltratadas, mujeres violadas y mujeres asesinadas.

*Funcionario