Siempre me ha quedado la duda: nunca he llegado a entender cómo el pueblo judío pudo ser exterminado de forma tan fulminante hace 70 años en la Alemania nazi. No creo que fuesen todos tan ingenuos como para no saber el destino final de las sumisas y largas filas hacia las cámaras de gas. Incluso hubo prisioneros judíos que fueron verdugos de su propia gente con tal de vivir unos meses más. Se resignaron a morir sin mostrar resistencia alguna, no se alzaron contra sus genocidas enemigos porque eran gente de paz, ellos siempre ponían la otra mejilla, era incompatible en su religión la violencia y la venganza contra sus enemigos. A los que quedaron con vida tras el Holocausto, les "fabricaron" un país usurpando con total arrogancia a sus verdaderos propietarios. A partir de entonces, estos "inquilinos" sionistas se han querido adueñar de más "parcelas" y siempre por la vía rápida contando con el eterno apoyo del primo de Zumosol. Aunque nos quieren vender al pueblo árabe como nido de terroristas, ya no vamos a caer dos veces sobre la misma piedra. Ellos quieren lo que es suyo y nada más. Pero qué vamos a explicar, cuando el país que maneja todo el cotarro se formó masacrando a los indígenas de América del Norte para instalarse ellos. La matanza de Gaza demuestra la "valentía" del pueblo judío: aviones de combate contra tirachinas, (los misiles de Hamas son petardos de feria en comparación). ¿Pero no decían los judíos que su religión les prohíbe la violencia? ¿O es que solo luchan cuando saben que van a ganar y no corran ningún riesgo? Un nuevo Holocausto ha nacido, las víctimas del nazi ahora son los verdugos. La gente pacífica lo tiene que ser siempre, sin depender del tamaño de tu enemigo; porque esa doble moral indica solo una cosa: cobardía.

Rafael Zamora Sancho **

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