Profesor

Qué triste es tener que oír lecciones de ética y valor de boca de algunos periodistas y políticos americanos, en referencia al no que los gobiernos de Francia, Alemania y Bélgica sostienen de cara a la guerra contra Irak sin más.

Tiene mandanga que estos americanos que en la primera y segunda guerra mundial hicieron el negocio del siglo con la venta de armamento, ¿o han creído en verdad que vinieron a luchar por la cara?, y que durante décadas se han cobrado con creces de la vieja Europa, ahora no dudan en ofenderla porque los rambos de turno están sorprendidos de que aquí, en este histórico continente, ¿unido?, hay gobiernos que piensan distinto a sus claros intereses económicos.

Bueno, no todo el mundo piensa distinto a estos supermanes del nuevo continente salvadores del mundo por amor a la humanidad, nacido al amparo del trabajo de millones de emigrantes europeos y otras cositas más, hay algunos gobiernos europeos como el español que está totalmente OK con ellos, a pesar de que el 90% del país no está por la puñetera guerra.

Guerra contra un país que tiene la desgracia de estar maniatado por un dictador tan impresentable como otros en otros tantos países del mundo, pero con la diferencia de que muchos de ellos no tienen petróleo, gas, oro o madera.

Esperemos que el petrodólar no termine comprando a las pocas voces políticas que claman en este desierto. Mientras tanto, los ciudadanos de a pie de casi todo el mundo se manifiestan diciendo: ¡No a la Guerra!

¡País de mayoritarios antibelicistas fastidiaos por unos pocos!