WEwl índice de participación en el referendo de la Constitución europea que se celebra hoy en nuestro país marcará el grado de interés que tienen los ciudadanos españoles en el proceso de construcción de la nueva Unión Europea.

Una participación cercana al 50% daría a España un papel relevante ante sus socios en el atrevido proceso de consolidación de la Europa de los Veinticinco. Una altísima abstención supondría, en cambio, un fracaso.

Es cierto que se somete a referendo un texto largo y complejo para los casi 35 millones de ciudadanos españoles que tienen derecho al voto, y eso explicaría una escasa afluencia a las urnas durante el día de hoy.

Pero durante la campaña previa a la votación se han dado argumentos suficientes para que los electores opten entre un sí --convencido o posibilista-- a dar un paso más en el sueño de la Europa unida-- o un no motivado por distintas razones, desde el nacionalismo radical catalán y las fuerzas situadas a la izquierda del Partido Socialista o a la derecha del Partido Popular.

El resultado de esta noche servirá para medir la capacidad de liderazgo del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, principal impulsor del sí .