El debate de investidura ha generado ciertas, por no decir muchas, hipocresías políticas. Porque hipocresía es decir que se tiene mayoría parlamentaria cuando solo se tienen 170 apoyos; porque en los 150 puntos del acuerdo Partido Popular-Ciudadanos, una gran mayoría solo son intenciones programáticas carentes de realidad, porque chocan con la propia Constitución o con lo que la UE exige o va a exigir. Hipocresía porque los principios que C´s reclamaba al inicio de la negociación han acabado tan descafeinados que hasta la corrupción ha dejado de serlo. Basta ya de especulaciones y de intentar engañar al pueblo. El verdadero culpable de que ya llevemos ocho meses sin gobierno es el PP, puesto que tras el resultado de las primeras elecciones no admitió su derrota e intentó, y lo logró, volver a unas segundas elecciones. Y no contento con el resultado de estas, puesto que tampoco ha conseguido la mayoría, intenta o amenaza con unas terceras, anunciando falsos apocalipsis. Sí, el índice de prima de riesgo es el más bajo desde hace años y crece la economía. ¿Exito del PP? ¡Pero si llevan ocho meses sin gobernar y torpedeando soluciones! Tal vez vayamos a unas terceras elecciones, pero no será por culpa de los otros partidos, sino del propio PP, que no actuó como debía en las primeras. Y en este debate de investidura han seguido igual, ninguneando a sus socios, menospreciando a la Cámara y chulos con sus logros irreales.