Abulense por lugar de nacimiento y vallisoletano por afectos, José Jiménez Lozano (Langa, Avila, 13-5-1930) recibió ayer el Premio Cervantes. Poeta y novelista, es especialmente periodista, porque su limpia y ceñida prosa se decantó durante años en miles de artículos en diarios y en revistas.

Licenciado en Derecho y Filosofía y Letras, en 1962 se tituló en la Escuela Oficial de Periodismo e ingresó en la redacción de El Norte de Castilla, periódico de Valladolid del que sería subdirector y luego director.

Compañero y amigo de Miguel Delibes, éste introduciría a Jiménez Lozano en el semanario Destino y fueron leídos con asiduo provecho sus ponderados artículos de católico comprometido con las libertades y el respeto a los derechos ciudadanos. Invitado al Concilio Vaticano II y biógrafo del papa Juan XXIII, el escritor destaca por sus conocimientos de la mística española y por su equilibrada exaltación de la tierra castellana y del talante de sus gentes.

Jiménez Lozano, con anterioridad al Cervantes, obtuvo los premios Castilla y León de las Letras, de la Crítica, Nacional de las Letras, Luca de Tena y Miguel Delibes. En 1997 donó su biblioteca y su archivo personal a la Fundación Jorge Guillén y vive en paz consigo mismo en la población de Alcazarén, desde donde afirma su rechazo de toda violencia.