El padre de la niña Mari Luz, Juan José Cortés , está dando, día a día, ejemplo de lo que es un ciudadano. Una vez más, a pesar de haber sufrido la pérdida de su hija y de que al juez que no encarceló a su presunto asesino solo se le ha condenado a pagar 1.500 euros, se ha expresado sin faltar al respeto a nadie.