Periodista

Ya se puede jugar a la guerra civil a través de internet. Gracias al videojuego 1936 podemos rememorar lúdicamente memorables batallas: el Jarama, el Alcázar, Teruel... Como dice el coordinador de la idea, se puede elegir un bando u otro, y quien gane, gana una magnífica oportunidad para alterar --virtualmente-- el desenlace de aquella terrible página de nuestra historia.

El hecho de que los promotores de la idea sean jóvenes --no sabemos si agobiados por las batallitas del abuelo-- habría de permitir la desdramatización del invento. Sin embargo, el foro de 1936 en internet abunda en comentarios de extraordinaria virulencia. Y es que para superar la pesada herencia moral de aquella tragedia civil falta aún otra generación.