CONFINAMIENTO EN ESPAÑA

La lata del teletrabajo

Amelia Vargiela

Hace unas cuentas semanas empecé un trabajo nuevo. Soy muy afortunada, por supuesto. Sin embargo, el comienzo ha sido de lo más extraño. Salvo por una breve visita a la oficina, he desarrollado todo el trabajo desde mi habitación ante la imposibilidad de hacerlo en otro sitio. Hago sola el descanso del café y me paso el día enviando correos a gente a la que aún no he puesto cara. Todavía no sé qué compañeros me caen bien o mal, porque no los conozco.

No soy partícipe de las dinámicas de la oficina, no me río con sus bromas internas y, por supuesto, estoy lejos de todo chismorreo. Además, peco bastante de improductividad porque en casa las distracciones son muchas, aún sin tener un compañero de mesa con el que hablar.

Dicen que esta situación nos puede llevar a que el teletrabajo se convierta en una práctica extendida en nuestro país. Habrá quien así esté más cómodo, claro. A mí, por el momento, me parece tan impersonal como aburrido. Una lata, vaya.

UNIVERSIDAD EXTREMEÑA

Exámenes con VAR

Guadalupe Martínez Vinagre

Arroyo de la Luz

Ayer leía con estupor en la prensa que la convocatoria del segundo cuatrimestre será a distancia y los docentes podrán grabar a través de la webcam a los alumnos mientras realizan las pruebas…

Pero señores que no estamos en el lejano Oeste, que estamos en España, un estado social y democrático de Derecho, según señala nada más y nada menos que el art. Primero de nuestra Constitución. Al menos hasta el día de hoy, país en el que efectivamente se han visto mermados algunos derechos en determinadas situaciones y según qué circunstancias. Pero el resto de todos y cada uno de nuestros derechos siguen absolutamente vigentes, al menos de momento…

¿Pero qué es eso de que se podrán grabar los exámenes? ¿Estamos locos o qué? ¿Le quieren añadir más estrés, más presión, más nervios, más… a los estudiantes? Que no sólo van a tener que lidiar con los que ya tienen normalmente ante cualquier examen, sino que además se añade el hecho de tener que hacerlos on-line con todo lo que implica. Pero como no es suficiente presión también queremos grabarlos, porque a algún lumbreras se le ha ocurrido hacerlo para evitar « que se vean alterados por comportamientos incorrectos…; para poder ser revisados posteriormente y poder detectar si algún estudiante ha tratado de hacer trampas». Algún lumbreras que, no tendría nada de extraño, le gustara o necesitara copiar cuando hacía los propios; que de todo hay en la viña del Señor. Pero seamos serios señores; en primer lugar todos sabemos, y digo todos porque en algún momento de nuestras vidas hemos estudiado, o eso creíamos o hacíamos creer; que en todos y cada uno de los exámenes del mundo mundial alguien o muchos, alguna o muchas veces, se ha copiado. Y en segundo lugar los estudiantes no son «el toro que mató a Manolete», vamos que ni han inventado el virus, ni lo han buscado ni lo han querido… son, como lo somos todos, unas víctimas más de ésta angustiosa situación por la que estamos atravesando, y no es justo que la soga se rompa siempre por el mismo lado. No vaya a ser que tengamos otra como aquella Selectividad tan sonada, o aquellos documentos falsos que permitieron ejercer en la UEX a quien en modo alguno correspondía, gracias a una esposa que ocupaba algún cargillo en la Universidad y que hicieron cargar con el mochuelo y con las nefastas consecuencias de nefastas actuaciones, a los estudiantes. Y éstos ya tienen suficiente con el trabajo y el sacrificio que están realizando, ellos y sus padres que en muchos casos se las ven y se las desean para que sus vástagos puedan ser alguien en la vida. Ya tienen bastante con tener que responder de temas que en algunos casos, presuntamente, ni siquiera les han sido explicados, ni presencialmente, ni on-line, ni gaitas.

Que sí, que es cierto, queestoeslo que nos ha tocado vivir y que ahora nos toca no divagar y arrimar el hombro. Pero no unos más que otros, pero no unos a costa de otros. Así que antes de meternos en berenjenales vamos a remar todos a una, que todos estamos en el mismo barco, estudiantes, padres, universidad, políticos….