Lectores

La voz ´minusválido´

F. G. Hernández

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Hoy se clasifica todo y se hacen estadísticas de todo tipo, y yo formo parte de esas clasificaciones al pertenecer al grupo de personas con alguna función física o psíquica alterada. Soy un discapacitado o minusválido, según el organismo o entidad que me catalogue, y me parece incorrecto y discriminatorio que se trate a alguien de discapacitado y minusválido. Toda persona, sea cual sea su estado, tiene sus capacidades, del mismo modo que todo el mundo tiene su valor como individuo. El Gobierno está potenciando los valores de la igualdad, pero la igualdad de los ciudadanos con alguna disfunción solo será real cuando se eliminen, además de las barreras físicas, estas actitudes negativas. Llamarnos discapacitados o minusválidos --al igual que, coloquialmente, subnormales o inútiles-- es una prueba de ese comportamiento incorrecto.

EL PERIODISTA DEL ZAPATAZO

Aún en la cárcel

José Luis Melgosa

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El periodista iraquí Muntadhar al Zeidi, que arrojó los zapatos al expresidente George Bush, sigue encarcelado. El propio Bush descansa plácidamente en su rancho de Texas. A Toni Blair le han condecorado con una de las máximas distinciones del país más democrático del mundo y le han nombrado embajador especial para Oriente Próximo. José María Aznar, ferviente católico, viaja por el mundo en olor de multitudes, a 30.000 euros la conferencia, hablando de libertad. Los tres de las Azores ordenaron acciones de guerra que han ocasionado la muerte de centenares de miles de personas, y el sufrimiento y la pobreza para generaciones de iraquís. Pero quien se pudre en la cárcel es un periodista que utilizó la palabra y los zapatos para denunciar los crímenes cometidos contra los suyos. El resultado de la ecuación es pura educación para la ciudadanía: gana y triunfa quien hace daño. Pierde quien hace el bien y quien actúa conforme a lo que siempre le han enseñado sus mayores y sus maestros.

LAS CAUSAS DE LA CRISIS

La competencia china

Olga Planas Sáez

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Se ha dado como uno de los motivos causantes de la crisis actual las hipotecas de bajo coste, que en EEUU originaron una gran catástrofe económica. Pero no se habla del gran gigante y problema que es China. Muchas empresas marcharon a países en los que la mano de obra era más barata. Consecuencias: mucha gente en el paro y el sector textil, aniquilado. Importadores sin ningún control han traído artículos de bajo coste a nuestro país y han castigado a las empresas nacionales. Cuando los chinos construyan coches y nosotros los compremos, nuestras empresas tendrán que cerrar y miles de personas irán al paro. Debemos dejar de comprar todo lo que China produce, fomentar el consumo nacional y poner impuestos o aranceles a las importaciones. Como consumidores, no tenemos conciencia de país y la tenemos que crear.

p Buscar un responsable

Roberto Alvarez Sastre

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Que las bolsas funcionan por el sentimiento del mercado es algo sabido y sufrido por quienes invierten en acciones. Lo nuevo es que la economía real también se comporte por sentimientos. No es lógico que en el sistema económico mundial todo dependa de las barbaridades de cuatro banqueros, ávidos del crecimiento y beneficio, y que el resto de mortales dependa de que acierten. Un día alguien se da cuenta de que sus activos eran basura, y se produce una reacción en cadena de la que no se libra nadie. Hoy, una acción de un gran banco español vale casi menos de la mitad que hace un año. Alguien debería ser responsable del desastre que esta situación provoca en muchas familias. A mí se me ocurre que es culpa del neoliberalismo de los últimos años. Los gobiernos no deben dejar de gobernar, y lo económico también es gestionable.