REPERCUSIONES DE LA CRISIS

Subir los impuestos

Ramón Durán

Correo electrónico

¡Subir los impuestos! Es una medida muy propia de este Gobierno con escasa imaginación ante la situación de crisis. Lo que es inadmisible es que llevan demasiado tiempo protegiendo a las grandes fortunas, eliminando o reduciendo impuestos y favoreciendo a los que menos lo necesitan. Por el contrario, llevan tiempo pensando en subir el IVA, que perjudica claramente a toda la clase media, y por ende al consumo, pudiendo agravar todavía más la actual crisis. Las grandes fortunas son intocables en nuestro país. Solo con gravar las segundas y ulteriores viviendas de un mismo propietario, los coches y las embarcaciones de lujo que tanto proliferan en los puertos deportivos y gravando progresivamente las rentas que no proceden del trabajo, ya se resolvería parte del problema. Auguro para este año un cuarto trimestre muy caliente e insoportable para el consumo.

Dinero en buenas manos

Víctor Rodríguez Corbacho

Mérida

Hace dos meses que el Consejo de Ministros aprobó un real decreto ley por el que se creó el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), que tendría una dotación inicial de 9.000 millones de euros, con una financiación mixta a cargo de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 6.750 millones de euros y de las aportaciones de los Fondos de Garantía de Depósitos en establecimientos bancarios, cajas de ahorro y cooperativas de crédito de 2.250 millones de euros.

El Consejo de Ministro de 13 de agosto, aprobó la ayuda especial de 420 euros durante seis meses a parados que hayan agotado las prestaciones a partir del 1 de agosto (eran 300.000 personas y 650 millones de euros de los PGE); el pasado día 2 el Gobierno rectificó, y pactó con los partidos de izquierda ampliarla a quienes padezcan esa situación desde el 1 de enero (serán 600.000 personas y 1.300 millones de euros de los PGE).

El Gobierno podría haber llegado hasta los 6.750 millones de ayuda especial a personas paradas como hizo con la banca, ampliando el plazo de cobro de la ayuda hasta el inicio de la crisis. Pero, como en España sólo se reduce el paro a partir de crecimientos del PIB de entre 2,5% y el 3%, ha considerado mejor que las ayudas estén en las manos de quienes no lo despilfarran y lo emplean bien, creando riqueza; en las mismas de quienes generaron la crisis.

PROFESIONES Y VOCACION

Amor, esa es la palabra

Joaquín T. Fortunati Cendero

Correo electrónico

Hay profesiones que no se pueden ejercer sin un mínimo de vocación, que no se basan en cumplir las ocho horas y despedirse hasta mañana, hay que volcarse en cuerpo y alma. Un ejemplo lo tenemos con los médicos, estas personas tienen que estar permanentemente localizadas porque se les puede necesitar en cualquier momento para una emergencia y tienen que estar disponibles las 24 horas. Otra es la de maestro, la mayoría de la gente no sabe que se llevan a casa los problemas personales de los alumnos, que actualmente son muchos, y durante horas fuera del trabajo, tratan de buscar soluciones. En las residencias de la tercera edad pasa algo parecido, toda persona que trabaje allí debe tener vocación y gustarle el trabajo que está desarrollando, de lo contrario no podrá cumplir medianamente la labor encomendada. Los ancianos son como los niños, necesitan mucho cariño y quien no se lo pueda dar no debería estar ejerciendo ese trabajo. De vez en cuando vemos noticias en las que se ven verdaderas atrocidades con estas personas, que indefensas tienen que soportar los malos modos de gente que no tenía que estar allí. De hecho tienen que cerrarse residencias por malos tratos, desidia o dejadez por parte de los empleados hacia estas personas. Actualmente tengo que visitar frecuentemente una residencia y sin preguntar, se puede apreciar, solo por las caras de las cuidadoras, las que son felices con el trabajo que desarrollan y las que están allí por el simple hecho de tener un puesto de trabajo. A veces me dan ganas de dirigirme a alguna de ellas y decirle: sé lo difícil que está conseguir un puesto de trabajo, pero cuando te salga algo mejor debes cogerlo, decididamente esto no es lo tuyo. En mi profesión tengo que estar conviviendo con alumnos todo el día. Desde que empecé, hace ya bastante tiempo, sigo a rajatabla una frase de S. Agustín; uno de los principales padres de la iglesia, que además de obispo, fue filósofo: "Aprueba a los buenos, tolera a los malos y ámalos a todos". Amor, esa es la palabra.