Lectores

Olvido para la romería de Santa Lucía

María Barrantes Godino

Cáceres

Queridos vecinos de Cáceres. Teníais una oportunidad de oro para solidarizaros con Aldea Moret, para ayudarnos y demostrarnos que tenemos el respaldo de la ciudad. Pero esta vez tampoco ha podido ser. De nuevo nos habéis dejado solos. Si peligrara el Womad, la feria o la Semana Santa, pondríais el grito en el cielo. Pero el hecho de que la Romería de Santa Lucía, la más antigua de Cáceres junto con San Blas, esté amenazada, os da simplemente igual. Quizás esta romería no tenga la misma dimensión que las grandes fiestas, pero es que nadie ha movido un dedo, salvo los medios de comunicación que han informado cumpliendo con su trabajo. El Ayuntamiento no ha tenido tiempo en seis meses de declarar público el camino de la ermita; el Obispado no ha emprendido ningún proceso jurídico al respecto pese a que la ermita es suya, y se ha limitado a esperar que lo hiciera el ayuntamiento, deseando claramente que le quitasen ese problema de encima. Ningún partido político ha emitido una nota en respaldo al barrio, ninguno de los columnistas habituales de los periódicos ha escrito una sola letra para apoyarnos, ninguna institución, tampoco ninguna parroquia, ninguna cofradía, ninguna asociación de vecinos, nadie... Un señor que lleva cuatro días como dueño de una finca borra de un plumazo el derecho centenario de miles de personas a acceder a una ermita. Lo estamos viviendo con profunda tristeza, para nosotros es una tradición importante. La solución ni siquiera era difícil, pero nadie ha hecho nada.

AUTOMOVIL

Otro cuento más

Oscar Castro Herrero

Correo electrónico

Había una vez un gobierno que, en su afán de activar el mercado automovilístico, concedió unas ayudas para que los dudosos compradores se decidieran a cambiar el vetusto coche por uno nuevo, todo pintaba muy bien, la ayuda se estableció en el llamado Plan 2000-E, pero resulta que la ayuda ha sido otro engaño más, dado que ahora hay que devolver un porcentaje a la Hacienda pública. ¿Qué hubiera pasado si la gente supiera que esto acabaría así? ¿Habrían subido las ventas? Pero bueno, siempre nos quedará el partido EET.

CRITICA POLITICA

Comentaristas y pedagogía

Ramón B. Iglesias

Correo electrónico

Muchos comentaristas políticos son unánimes en las críticas al Gobierno de Zapatero. Son críticas de todo tipo que dan al Ejecutivo por caducado y, por tanto, apuestan implícitamente por un cambio. Eso no significa que apuesten por Mariano Rajoy, ya que también atacan los comportamientos de la derecha, a la que acusan de no ser europea, de no estar civilizada. ¿Qué se puede deducir de todo esto? Creo que una gran inconsciencia. ¿Qué pasará cuando tengamos al PP en el poder? Nadie se lo plantea a fondo; ahora todos se apuntan a tirar bolas contra el muñeco de turno, Zapatero. Nadie se plantea qué horizonte nos espera después. Esta actitud dice muy poco de estos comentaristas. Critican por criticar, por su incapacidad de hacer un buen análisis de la realidad, y así están llevando al país al camino del cambio. Esos expertos demuestran una falta de valentía para poner de relieve lo que este Gobierno ha hecho por el país; no son capaces de un análisis posibilista. Hay que criticar, claro, pero constructivamente. Hacerlo con descalificaciones no lleva a ninguna parte.

El PP, si vuelve a gobernar, causará un grave retroceso. Todos los procesos contra la corrupción y de renovación de las instituciones se frenarán. Nos convienen políticos con amplitud de miras, y eso se tiene que fomentar en las columnas de los diarios y en las tertulias audiovisuales.

¿Acaso no distinguen esos comentaristas entre las intenciones de la izquierda y las de esta derecha? Hay que mirar más lejos, y hablar y escribir de los valores de la política, la de izquierdas y la de derechas.