OPORTUNISMO DEL PP

A vueltas con el agua

Manuel Gallardo

Correo electrónico

Esto del agua se ha convertido para el PP de Cáceres en un auténtico manantial del que brotan una tras otras las oportunidades de crítica fácil al gobierno socialista.

Asistimos sorprendidos al papel de sindicato que ha asumido el Partido Popular de Cáceres, con esa encendida defensa del mantenimiento de los puestos de trabajo de la empresa concesionaria del servicio de agua. Es enternecedora la frase de "Aquí no sobra ningún trabajador y no consentiremos que ninguna familia se quede en desempleo", expresada por la portavoz popular.

Ahora resulta que los costes no están bien valorados por los técnicos municipales y según el partido mayoritario en la oposición habrá que subir aún más el coste a los ciudadanos; eso sí, el PP dice que "trabajará para que la subida sea la menor posible". ¿El 60% quizás?

Luego, le ha llegado el turno a que la alcaldesa es la que tiene que pagar de su bolsillo el retraso de la concesión.

Así las cosas, parece que vale todo, se critica demagógicamente sembrando la duda sobre la continuidad de los trabajadores y luego lanzando un anuncio sobre que el coste del agua será mucho más alto para los ciudadanos.

En fin, un cúmulo de despropósitos que alejan el debate político de un mínimo de altura intelectual, utilizando nuevamente el discurso del miedo, intentando generar un clima de desconfianza y de inseguridad en la ciudadanía cacereña.

Los partidos en el gobierno y los que están en la oposición, da igual el color, están obligados a jugar cada uno su papel de una forma honesta, velando todos por el interés y en beneficio de aquellos a los que su acción política va dirigida.

ESTATUTO CATALAN

Montilla-Comanys

Rodrigo Mediavilla Pérez

Correo electrónico

Tras conocer el fallo del Tribunal Constitucional, José Montilla, presidente de la Generalitat de Cataluña ha llamado a todos los catalanes a la movilización ciudadana. Ahora todos nos preguntamos qué entiende por "movilización ciudadana". ¿Hará el señor Montilla como Lluis Companys en 1934 asomándose al balcón y proclamando el Estado Catalán? o ¿Le saldrá la vena catalana y se dará cuenta que de esa forma no podría seguir chupando del bote como lo hace ahora? Claro que ciertamente por las venas del bachiller Montilla no corre sangre catalana sino cordobesa... Y mientras tanto el resto de españoles a agachar la cabeza como si esto no fuera con nosotros ¡Qué vergüenza!

CRITICA POLITICA

Entre borregos

Alberto Ríos Mosteiro

Correo electrónico

En este país hubo quien afirmó, hasta la náusea, que tras los atentados del 11 de marzo no había ninguna célula yihadista, sino una ETA dispuesta a ayudar a Zapatero a hacerse con el poder para, posteriormente, recibir a cambio la autodeterminación de Euskadi y la entrega de Navarra; también hubo quien dijo que, tras la ruptura de la tregua terrorista, los etarras estaban más fuertes que nunca. En este país hubo quien dijo que, con la aprobación de la ley de matrimonio homosexual, la familia se rompía; En este país hubo manifestaciones exigiendo una verdad que acusaba al gobierno socialista de connivencia con los terroristas, manifestaciones en contra de un gobierno que quiso aprovechar la oportunidad de materializar el final del terrorismo; hubo manifestaciones, con recogida de firmas incluida, en contra de los derechos civiles de un sector de la sociedad. Con la perspectiva del tiempo, la verdad de los hechos se ha impuesto a la mentira para mostrarnos que no hay el menor rastro de ETA en la autoría del mayor atentado perpetrado en territorio europeo, que la rendición y ´traición a los muertos´ eran una calumnia que se desvanece ante el incuestionable debilitamiento de los eternos cobardes, que la familia no la rompen los gays sino las drogas o la violencia de género, y que solo existe una Nación, porque si el preámbulo constitucional no tiene eficacia jurídica, mucho menos puede tenerla el preámbulo de un estatuto. En este país hubo quien decidió entrar en el redil de la mentira y, ante la aplastante verdad, hoy se pregunta ´¿han llegado a la convicción de que somos una pandilla de borregos?´. A la vista de los hechos, la pregunta sobra.